Pujols se impone al dolor

San Luis, Missouri. Albert Pujols es conocido como “La Máquina”. El mote no es porque puede batear sin parar, también lo recibe porque se necesita más que achaques para sacarlo de la alineación.

San Luis, Missouri. Albert Pujols es conocido como “La Máquina”. El mote no es porque puede batear sin parar, también lo recibe porque se necesita más que achaques para sacarlo de la alineación.

El primera base de los Cardenales de San Luis no se detiene por un instante, a pensar de que le duele allí o aquí. Simplemente hace su trabajo como si nada pasara.

“Me molesta la mano izquierda, puedo decir que siento dolor en ocasiones, pero eso se resuelve con tratamiento antes de los juegos”, dijo Alberto a El Caribe antes del partido de ayer contra los Dodgers de Los Ángeles.

El dominicano fue de los primeros en llegar ayer al Busch Stadium por varias razones: preparación de rigor que se realiza en el primer juego de cada serie y recibir terapia en su mano izquierda afectada, la misma que en junio le mandó a la lista de lesionados y que le hizo perder 13 encuentros.

“Estamos en la parte final de la temporada y estamos en lucha por clasificar. Sé que Milwaukee nos lleva una buena ventaja, pero mi equipo me necesita y debo dar la cara”, comentó.

La durabilidad es una de las características principales del que muchos consideran el mejor pelotero de las Grandes Ligas. Su menor cantidad de partidos en una campaña es 143 en 2006. Su proyección para esta contienda es de 144, según aparece en el sitio web del prestigioso Espn.

¿Y las dudas? Pujols ya cruzó de los 30 jonrones, extendiendo a 11 su cadena de temporadas con esa cifra de cuadrangulares, único pelotero en la historia que hilvana esa racha al comienzo de su carrera.

Su comienzo de campaña no fue el mejor y eso motivó a una oleada de comentarios que pusieron en duda su capacidad de reacción ante la presión de encontrarse en su último año de contrato con San Luis.

“No le hago caso a críticos ni a lo que digan. Siempre habrá gente diciendo de todo y poniendo todo en duda. Yo solo confío en la habilidad que Dios me ha dado y salgo cada día al terreno a poner en alto el nombre mi país, de mi equipo y a respaldar a mis compañeros”, manifestó.

Sé que comencé diferente a lo que ha sido mi carrera, pero creo que mis números en estos momentos dicen que he tenido una buena temporada. Yo diría que ya tengo una campaña que cualquiera quisiera tener”, indicó.

El tres veces ganador del premio al Más Valioso de la Liga Nacional inició la jornada de anoche con un promedio de .289, 31 vuelacercas y 77 impulsadas.

“La verdad es que no le doy mente ni pienso en eso de que me falta esto o aquello. El que trabaja fuerte y está con Dios no tiene que preocuparse ni pensar en lo que dirán. Cuando llegué a los 30 jonrones, fue un día normal. Una vez más que lo hago en mi carrera y a seguir jugando”, agregó el dominicano que ha estado en las dos versiones del Clásico Mundial de Béisbol con República Dominicana.

Alberto lleva 10 estaciones en línea con 30 cuadrangulares, 100 impulsadas y .300 de promedio. Su actual compañero Octavio Dotel desea que mantenga esa racha viva.

“Cuando dio el jonrón 30, le dije que ahora se concentrara en las impulsadas. Sé que lo hará”, expuso Dotel. Por algo le dicen “La Máquina”.

La Russa sigue maravillado

Tony La Russa posee una doble condición: es el dirigente de los Cardenales de San Luis y a la vez el principal admirador de Pujols. La Russa no deja de reconocer los números que ha registrado en cada temporada, pero algo más le llama la atención.

“Alberto no ha cambiado desde el primer día y sigue siendo un profesional. Llega temprano, trabaja duro, juega con dolor, no se para por nada. Van donde el doctor, terapia y a jugar”, dijo el mánager con más victorias dentro de los activos con 2,676 (no incluye el juego de ayer)  y tercero de todos los tiempos detrás de John McGraw (2,763) y Connie Mack (3,731).

¿Cree que este año Pujols sintió un poco de presión?  “Estamos hablando de Albert Pujols. Él no conoce la presión. Su carrera está ahí. Cada pelotero tiene sus altas y bajas, con él la consistencia se ha mantenido”.

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