¡Qué silencio!

Eddy Olivares durante el proceso electoral la punta de lanza de la candidatura presidencial de Hipólito Mejía en la JCE. Fue el primero en cuestionar a la institución a la que sirve, como amenaza para las posibilidades de triunfo del candidato del PRD. Su arranque más contundente lo constituyó su denuncia de una conspiración para cancelar a uno de los titulares paralelos del Centro de Cómputos, Miguel Ángel García, como parte de una trama del presidente de la JCE, Roberto Rosario, y el PLD. En su campaña de denuncias logró arrastrar a Mejía, quien asumió ese discurso de una manera total: No dejaré que me hagan coca. Las elecciones transcurrieron. Hemos escuchado todas las quejas, pero Olivares guarda silencio rotundo.