Santiago.-La destrucción de puertas y los cristales en la unidad de cuidados intensivo pediátrico en el hospital infantil Arturo Grullón por parte de una indocumentada haitiana se suma a las amenazas de otros ocho hombres al personal médico.
Rosa María Morel, directora del centro de salud dijo que hace varios meses solicitaron aumentar el personal de seguridad, pero aún no reciben respuesta de las autoridades.
El hospital apenas cuenta con cuatro militares y cuatro agentes policiales que se rotan de dos en dos.
El incidente del pasado miércoles fue producido por la madre de una niña de un año de nacido que lleva varios días ingresada en el hospital Arturo Grullón, afectada de una enfermedad y que la mantiene en condiciones críticas. Mientras que a principio de esta semana, ocho indocumentados haitianos amenazaron el personal médico y de enfermería.
Los intentos de agresión fueron el apoyo a una madre indocumentada, cuyo niño murió en el centro de salud, pero que de forma confusa, la mujer ahora pide le entreguen otro infante, hijo de otra extranjera de la vecina nación. El caso de inseguridad no es exclusivo del Arturo Grullón.
Recientemente, cinco médicos y a varias enfermeras del hospital de Hato del Yaque fueron agredidos físicamente por parte de familiares de pacientes.
“Aquí de día y de noche vienen familiares de pacientes y nos agreden físicamente. A mi recientemente me abofetearon y otro se atrevió a meter una motocicleta desde emergencia hasta la sala de cirugía”, expresó la doctora Yeimi Sánchez.
Ayer, una comisión de la embajada haitiana y acordó con la dirección del hospital infantil Arturo Grullón llevar al INACIF el cuerpo de un recién nacido fallecido en ese centro de salud y cuya madre denuncia fue cambiado. La decisión de las autoridades busca realizar las pruebas correspondientes y que las partes interesadas tengan la certeza de la información suministrada por el hospital.
