SANTIAGO.– Desconocidos penetraron a la Casa de Emaús, en Santiago, y se llevaron la alcancía de las limosnas que dejan los feligreses frente a la imagen del Divino Niño.
De acuerdo a una nota del Arzobispado, esta profanación de la Casa de Emaús, que sirve de templo por la reparación de la Catedral, ha llenado de tristeza a la comunidad parroquial.
Durante tres días no habrá misa por este hecho vandálico. Los fieles se congregarán para orar y hacer vigilia, como un acto de desagravio ante el hecho cometido.