Sin importa cómo se le diga, aquí las aguas se mueven a varios colores: sus aguas a verde y azul, a eso súmele el colorido de sus peces; lo que produce una vista espectacular que hace que las letras de la canción “Cayo arena”, de Juan Luis Guerra, tengan razón para haber sido escritas.
Es que, gente, Cayo Arena es precioso. Es inusual. Es un pedacito de tierra ubicado frente a las costas de las Playas de Punta Rusia, una playa muy extensa, con aguas cristalinas y una suave arena blanca, y La Ensenada en Puerto Plata, donde tal y como dice Juan Luis hay que ir de cualquier manera.
Hay varias formas de llegar: dependiendo de dónde te hospedes, si decides quedarte en Puerto Plata, tendrás un camino totalmente asfaltado hasta llegar a la Playa Ensenada y de ahí tomar la lancha a Cayo Arena, un recorrido de unas dos horas y media. De igual manera, puedes hospedarte en Montecristi y de ahí salir temprano a tu destino final.
En la playa La Ensenada encontrarás varios quioscos que ofrecen comida típica con mariscos frescos y el servicio de lanchas para ir al Cayo. Al llegar, te sentirás como en el set de una sesión de fotos, paisajes hermosos de montañas, agua totalmente cristalina con corales perfectos para practicar snorkeling y buceo para los más arriesgados. ¿Y esa arena? Fina. Blanca. Bella.
El sentido de paz y de naturaleza pura que te ofrece Cayo Arena no es comparable con nada más, allí el bullicio y la rutina se pierden totalmente y la naturaleza reina en su mayor expresión. Por ello, quizás, Cayo Arena es sin dudas el secreto mejor guardado de este país, el cual deslumbra a todos sus visitantes.
