NACIONES UNIDAS. Las posibilidades de un alto al fuego en Siria parecen esfumarse cada día más luego de un retroceso en las negociaciones, ayer, en Naciones Unidas.Rusia y China volvieron a vetar una resolución de Naciones Unidas, respaldada por Occidente, que amenazaba al gobierno del presidente sirio Bashar Assad con sanciones no militares si no suspende el uso de armamento pesado en el conflicto, que ya cumple 16 meses.
La votación -con 11 votos a favor, dos en contra y dos abstenciones- fue el tercer doble veto de Rusia y China, los aliados más importantes del régimen de Assad. Las abstenciones fueron de Sudáfrica y Pakistán.
La votación también dejó en el limbo el futuro de la misión de observadores de la ONU en Siria, de 300 soldados, cuyo mandato expira el viernes.
El embajador británico en la ONU, Mark Lyall Grant, quien patrocinó el proyecto de resolución, dijo que estaba “consternado” por el tercer doble veto.
Fue un duro golpe a Kofi Annan, el enviado de la ONU y la Liga Árabe a Siria, quien advirtió que habría “consecuencias” si no se cumplía con el plan de paz de seis puntos, al cual el gobierno de Assad ha hecho caso omiso. Annan m,antiene la esperanza de un acuerdo.