«En dos o tres años estará acabada la sacristía, que será como el ensayo general de la gran torre central, que alcanzará los 170 metros de altura», aseguró en Barcelona el hasta ahora presidente de su patronato, Joan Rigol, en una rueda de prensa en la que anunció además su dimisión, argumentando que ha visto cumplidos sus objetivos.
«En algo más de siete años llegaremos a lo alto de la torre central, situada sobre la Sala del Crucero, y que se iniciará dentro de un par de años», añadió.
Llamada a ser la gran obra arquitectónica del catolicismo del siglo XXI, la Sagrada Familia comenzó a ser construida en 1882. Un año después, Gaudí (1852-1926) entró en el proyecto y acabó asumiendo las riendas del mismo. A ella dedicó 43 años de su vida.
Concebida inicialmente como una obra neogótica, terminó siendo una de las grandes obras del modernismo. El templo está en la lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO. En noviembre de 2010 fue consagrado por el papa Benedicto XVI.
Símbolo de Barcelona, la obra cumbre del arquitecto catalán es el monumento más visitado de la segunda ciudad de España. Para este año, el patronato espera recibir cerca de 3,2 millones de visitantes. «El monumento más visitado de España sobrepasará por primera vez la cifra de tres millones», dijo Rigol.
A partir de enero se pondrá en marcha un programa de venta de entradas por Internet para evitar las aglomeraciones dentro y fuera del templo.
