Sugieren aprovechar crédito PetroCaribe para inversiones

El economista Bernardo Fuentes consideró ayer que la ratificación de Petrocaribe entre Venezuela y los países que se benefician del acuerdo es una noticia positiva para República Dominicana.

El economista Bernardo Fuentes consideró ayer que la ratificación de Petrocaribe entre Venezuela y los países que se benefician del acuerdo es una noticia positiva para República Dominicana.Según Fuentes, esa ratificación brinda seguridad de que, en el corto plazo, esta nación seguirá siendo beneficiada por el financiamiento que contempla el mecanismo.

Sin embargo, el también economista Ernesto Selman, vicepresidente del Centro Regional de Estrategias Económicas Sostenibles (CREES), cuando aborda el tema se pregunta hasta cuándo las condicionalidades ventajosas en la venta de combustible podrán permanecer sin cambios. Cuando Selman toca ese punto se refiere a la fuerte presión interna que, según él, existe en Venezuela, para limitar ese tipo de préstamo subsidiado con la venta de petróleo.

En marzo pasado, República Dominicana tenía una deuda por concepto de Petrocaribe superior a los US$3,000 millones. Selman calcula que se trata de más de US$3,200 millones y Fuentes estima que el monto asciende a US$3,215 millones. “Es decir, que el Gobierno se ha ahorrado dicho monto en el sentido de que no ha tenido que buscar ésos dólares para pagar la factura petrolera. Sin embargo, no es un ahorro sino más bien un financiamiento pues dichos recursos deben ser pagados en algún momento futuro”, aclara Fuentes, representante de la firma Economi-K. Los dos economistas, aunque se refirieron al tema de manera separada, coinciden en un punto vital: el Gobierno ha estado endeudándose para pagar gastos corrientes, cuando lo correcto es que el dinero que no está pagando ahora, sino que pagará a largo plazo, sea invertido de forma productiva para asegurar el repago del préstamo. Partiendo de lo anterior, Fuentes entiende que es necesario realizar cambios radicales  en el uso de dichos fondos en República Dominicana.

“No conozco ningún documento que exponga claramente el destino que se le ha dado a los fondos de Petrocaribe. Mi mejor estimación es que se han usado en gran parte para el subsidio eléctrico”, planteó el representante de Economi-K.  Y agregó que “para 2013, el Presupuesto contempla financiamiento por unos US$650 millones, es decir, alrededor de RD$27,040 millones. Esto representa el 18% del total de financiamiento contemplado para 2013”.

El consumidor paga doble

De acuerdo a las expresiones de Fuentes, uno de los grandes peligros con Petrocaribe es que el consumidor del combustible paga el precio completo y luego el Gobierno se queda con parte de estos recursos que no entrega a Venezuela (ahí el financiamiento y el ahorro de dólares).

“Si los recursos no son bien invertidos, existe el riesgo de que el Gobierno aumente impuestos para poder obtener los recursos para repago. De cierta forma, el consumidor pagaría dos veces”, apuntó el experto.

“Eso no es sostenible”

Cuando a Ernesto Selman elCaribe le pregunta qué tan beneficioso ha sido Petrocaribe para República Dominicana, responde: “Desde nuestra perspectiva, financiar gastos corrientes, y específicamente, subsidios y transferencias a través de préstamos de largo plazo es una estrategia que no es sostenible en el tiempo. Estamos asumiendo préstamos, aún en condiciones relativamente favorables con otro financiamiento”. El vicepresidente ejecutivo de CREES dijo que hay otros componentes ligados a la geopolítica que preocupan.

¿Se usa para mantener países como aliados?

Ernesto Selman, cuando habla de Petrocaribe, cuestiona hasta qué punto esa facilidad de venta de crudo es utilizada por el gobierno de Venezuela para tener países “supuestamente aliados” de su lado. “Es un tema que sale del plano económico, pero puede tener consecuencias económicas en el mediano plazo”, advierte. República Dominicana tiene la posibilidad de pagar el petróleo que adquiere con una serie de productos agropecuarios, como habichuelas negras, azúcar líquida, y servicios como turismo y zonas francas. Selman dice que “llama la atención que nos movamos a la economía del trueque, cuando hay medios de intercambio reconocidos a nivel mundial. “El trueque es un pago en especie. Eso llama la atención”, apuntó.

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