La telemedición, una de las herramientas concebidas por las autoridades del sector eléctrico para reducir las pérdidas en distribución, logró un avance cualitativo en el 2014, aunque se quedó corta en la parte cuantitativa por insuficiencia de financiamiento.Las empresas distribuidoras de electricidad instalaron un total de 188,879 medidores con tecnologías de telemedición en la actual gestión, para llegar a 320,033 clientes tele medidos.
Con ese nivel, dice un informe de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE), las Edes aseguran el 56% de la energía que facturan. Para lograr ese nivel, las distribuidoras han trabajado en 90 de sus circuitos.
Macro medición
Las Edes cuentan además con unas 3,000 macro-mediciones que les permiten controlar la energía que les sirven a los clientes de mayor consumo en industrias, plazas comerciales y sectores residenciales.
La ejecución del programa de tele medición fue inferior a lo programado, debido a la insuficiencia del financiamiento externo proyectado y a la falta de fondos de parte de las distribuidoras de electricidad.
A la fecha, 491 circuitos cuentan con algún tipo de tele-medición, estos representan un 90% del universo del total de los circuitos de las empresas distribuidoras de electricidad.
Las autoridades del sector han determinado que a mayor cantidad de clientes telemedidos en los circuitos, menores son las pérdidas promedio. Estudios realizados al respecto dan cuenta que los circuitos con más del 60 por ciento de los clientes telemedidos que correspondieron a 144 circuitos, que representan el 26.3 por ciento del universo y manejan el 32.7 por ciento de la energía inyectada, poseen menos de 10% de pérdidas.
La telemedición es el primero de dos proyectos que integran el programa de reducción de pérdidas comerciales y es uno de los tres pilares en los que descansa el Plan Estratégico diseñado por las autoridades del sector para enfrentar el viejo déficit que acompaña al mercado eléctrico dominicano.
La reducción de pérdidas técnicas y comerciales en las empresas distribuidoras, es el segundo eje del plan estratégico del sector eléctrico, el cual prevé reducir las pérdidas de energía de 35.5% en el 2012 a 25.1% en el año 2016. Ese proyecto requiere una inversión de US$38.0 millones para reducir cada punto de pérdida, con lo cual se recuperan US$16.0 millones por año, que al final de la etapa de la estrategia produciría un ahorro de entre 190 y 200 millones de dólares por año, según las proyecciones de las autoridades.
Los puntos sobre los que descansa el programa de reducción de pérdidas comerciales son la tele medición, que se centra en monitorear y asegurar la energía servida y la rehabilitación de redes y normalización de clientes, para aumentar la cantidad de éstos.
Esas iniciativas se soportan en acciones de gestión social y disciplina comercial; la primera para educar a los clientes en cultura de pago y el uso racional de la energía y la segunda para garantizar que los resultados sean sostenibles.
La reducción de pérdidas tiene ya cifras medibles, según indica el informe de la CDEEE. De finales del 2012 a diciembre del 2014, las pérdidas se redujeron en 3.5 puntos porcentuales, equivalente a un 10 por ciento de disminución global.
Mejoramiento de la distribución marcha
Simultáneamente se ejecuta el plan de expansión del sistema de distribución de las Edes, también denominado Programa de Mejoramiento del Sistema de Distribución, cuya meta principal es construir las nuevas redes y subestaciones necesarias para reducir las pérdidas técnicas de energía y garantizar la calidad del servicio que se brinda a la población. Ese plan contempla la construcción de 34 subestaciones de distribución, repotenciación y/o ampliación de 27 subestaciones, y agregar dos subestaciones móviles para garantizar el servicio eléctrico a grandes concentraciones de clientes ante fallas en alguna subestación fija o ante la necesidad de cualquier mantenimiento en esas instalaciones. Esos programas requieren de unos US$200 millones y ha habido retraso para el financiamiento. Un informe de la CDEEE dice que al cierre del 2014 el programa de Mejoramiento del Sistema de Distribución a nivel nacional no contaba con financiamiento, aunque avanzaba utilizando ingresos de las Edes para invertir en proyectos prioritarios, los que pudieran comprometer el aseguramiento del suministro energético.
