Religiosos de la capilla San Andrés, del hospital Padre Billini, de la Ciudad Colonial, temen que en cualquier momento el techo y el retablo se desplomen encima de ellos, debido a problemas de filtraciones.De acuerdo con sor Adelina Roque, las filtraciones afectan principalmente el retablo, que está carcomido por la humedad, a la sacristía y el altar del templo, construido en 1512.
Se queja también del olor a humedad que hay en el templo, lo que provoca problemas respiratorios a quienes acuden a misa, que son los pacientes recluidos en el centro de salud, además de personas particulares.
Dice que los fieles acuden a la misa, que es oficiada a las 6:30 de la mañana, con gran aprehensión.
El temor de que les caiga un pedazo del techo mantiene en zozobra a los feligreses. Hace poco tiempo unos pedazos del techo del baño se desplomaron, señaló la religiosa, quien explicó que se ven precisados a colocar cubetas para atrapar el agua que se filtra en casi toda la estructura del edificio.
Sor Roque pide la intervención urgente de las autoridades para que reparen el templo, donde cada día los pacientes del Padre Billini que pueden llegar hacia él van en busca de descanso y consuelo espiritual. Asegura que la capilla San Andrés tiene uno de los retablos coloniales mejor diseñados del país, tallado a mano, por lo que cree sería una lástima dejarlo caer por falta de mantenimiento.
Valor histórico
Tanto la capilla como el edificio hospitalario fueron iniciados después de la salida de fray Nicolás de Ovando de la isla, en 1512. Ambos han sido sometidos a varios remozamientos, pero se mantiene intacto el diseño colonial. La capilla tiene un acceso por la calle Arzobispo Nouel, otro por el flanco oeste, que la comunica con el hospital. En la capilla están sepultados los restos de la madre del patricio Francisco del Rosario Sánchez, María Olaya.
