El próximo primero de Diciembre se inaugura la tercera versión del Parque de Luces Brillante Navidad, alusiva en esta ocasión a la vida marina.El impresionante parque, visitado en años anteriores por más de 4 millones de personas, no sólo constituye uno de los principales logros de la actual administración del Ayuntamiento del Distrito Nacional sino que además es la envidia de los demás países de la región pues no existe en latinoamérica otro parque temático de majestuosidad similar.
Esta espectacular iniciativa no sólo es un deleite visual sino que enciende el ánimo y el espíritu de la Navidad y ofrece numerosas opciones de actividades gratuitas para toda la familia, venta de alimentos y bebidas a bajos precios, áreas de esparcimiento que pueden ser utilizadas libremente para hacer picnic o cumpleaños, gimnasio moderno y bien equipado, baños limpios y entre otras cosas eventos artísticos y culturales que lo convierten en la alternativa navideña más completa en todo el país.
Resulta absurdo y mezquino que aún persistan algunas críticas de personas insensibles ante las necesidades de los demás que desde la comodidad de una realidad privilegiada, mientras sus hijos van a Disney World y a Blue Mall, quieren dejar sin opciones a aquellas familias que simplemente no tienen recursos para agradar a sus niños en Navidad, pero por suerte estos antisociales no han podido boicotear la mejor opción que tienen los padres pobres (esos que sí constituyen mayoría en República Dominicana) para que sus hijos disfruten al menos en esta época.
Las quejas fundamentadas en un presunto gasto excesivo tampoco prosperaron. Ya fue explicado que la inversión en luces, equipos y demás no es del sector público sino de las empresas privadas en calidad de patrocinadores, algo que además resulta evidente al visitar el parque porque cada área tiene algún elemento promocional distintivo de la empresa que la patrocina. Y aunque no fuera así, invertir en esto valdría la pena ya que el entretenimiento no sólo es parte imprescindible de la vida como alimentarse o trabajar, sino que es también una prioridad para construir personas y comunidades más saludables.
Los capitaleños y dominicanos en general (de todo el país vienen personas a disfrutar esta maravilla) tienen derecho a un respiro y este hermoso parque es sin duda alguna una bocanada de aire fresco.
