Sao Paulo, (dpa) – El ex presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Lula, tuvo una «extraordinaria» reacción a la quimioterapia a la que se somete para combatir un cáncer de laringe, que redujo en un 75 por ciento el tumor, lo que descarta la hipótesis de una cirugía, anunciaron hoy los médicos.
«Esta reducción excede un poco lo que esperábamos. Fue extraordinaria y hasta sorprendió al equipo médico», anunció el oncólogo Artur Katz, en una rueda de prensa concedida este lunes en el hospital Sirio-Libanés, de Sao Paulo.
A su vez, el cirujano Luiz Paulo Kowalski anunció que el resultado de los análisis realizados hoy a Lula hacen que la hipótesis de realizarle una intervención quirúrgica esté ahora «totalmente descartada».
Según el oncólogo Paulo Hoff, el tratamiento de Lula se completará a partir de enero, cuando el ex mandatario enfrentará sesiones diarias de radioterapia aliada a quimioterapia por un período de entre seis y siete semanas.
Hoff afirmó que esta segunda fase del tratamiento se realizará tal y como había sido planificada, y que no será reducida a raíz de los buenos resultados de los análisis.
«La radioterapia es la parte que lleva a la curación. No la disminuiremos porque es lo que va a eliminar totalmente el cáncer», aclaró Hoff, quien agregó que espera que Lula pueda reanudar su vida normal a partir de marzo de 2012.
A su vez, el médico personal de Lula, Roberto Kalil Filho, informó que el mandatario recibió «muy aliviado» las buenas noticias del equipo responsable de su tratamiento.
«Antes de los exámenes, obviamente, estaba muy preocupado. Cuando le di la noticia fue un alivio. Está muy aliviado», expresó.
Lula da Silva, de 66 años de edad, se realizó este lunes la última de tres sesiones de quimioterapia para combatir el tumor maligno de «mediana agresividad» y tres centímetros de diámetro diagnosticado el 29 de octubre pasado en su laringe.
El ex presidente, quien el mes pasado se quitó la barba que lo hizo famoso desde la década del 70 y también se rapó la cabeza para anticiparse a los efectos de la quimioterapia, pasará la noche en el hospital, para que se puedan monitorear posibles efectos colaterales de la quimioterapia, y mañana regresará a su casa, en la vecina ciudad industrial de Sao Bernardo do Campo.
