Santiago. El embalse Tavera-Bao comienza a descender cinco centímetros por día, debido a la sequía y a que el uso agrícola comienza a triplicar el de consumo humano.Actualmente la Corporación de Acueducto y Alcantarillado de Santiago (Coraasan) ofrece 114 millones de galones diarios y la demanda es de 124 MGD. Estos problemas son atribuidos a la continuidad de la sequía, lo que representa un déficit de diez millones de galones por día y ha motivado a retomar las medidas de calendarización del servicio en distintas comunidades.
De acuerdo a la Coraasan, el consumo agrícola es de 365 millones galones por día, mientras que para el consumo humano es de 114 MGD, aproximadamente 16 metros cúbicos por segundo. La entidad informa que está perdiendo agua en la captación. El director operativo de la Coraasan, Héctor Jáquez, advierte que de no llover en mayo, la presa podría bajar 315.00 metros sobre el nivel del mar, que sería muy crítico.
“Aquí todavía no se puede disminuir el consumo agrícola porque el arroz de la Línea Noroeste está madurando y requiere agua para las próximas tres semanas. Después de ahí lo podemos bajar”, expresa Jáquez. Debido a la reducción de la oferta, cada vez son más las comunidades que se suman a las quejas por la escasez.
Ante la preocupación de entidades ligadas al sector agua por el calentamiento global, la contaminación, la escasez de agua y el deterioro de la calidad de los recursos naturales que obligan a la planificación de una gestión integral de los recursos hídricos, será realizado un congreso internacional para tratar la situación a partir de este jueves.
En varias ocasiones, el director general de la Coraasan, Silvio Durán, ha dicho que espera que con la construcción del acueducto de Cienfuegos mejore el suministro en barrios de la zona sur y otros puntos de la ciudad y la provincia donde el servicio es precario y sus residentes han comenzado a manifestar sus quejas debido a que no les llega con regularidad.