La decisión del presidente Danilo Medina de suspender su viaje y exposición ante la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) en Nueva York, se produjo apenas dos días después de que una misión de esa organización lo visitara al Palacio Nacional para pedirle que interceda ante las personas de origen haitiano a las que se les ha negado la nacionalidad.
El mandatario no se habría sentido a gusto por lo que algunos de sus asesores califican de injerencia de parte del organismo internacional sobre los asuntos internos del Estado.
La misión encabezada por el coordinador residente de la ONU, Lorenzo Jiménez de Luis, visitó al mandatario el pasado viernes 20 donde le expresó que para ese organismo, la situación de los haitianos hijos de indocumentados es “preocupante” y “delicada”.
En ese momento el presidente Medina le comunicó que podría acceder a la solicitud de la misión de recibir a los reclamantes de nacionalidad en su despacho, pero que no podría complacerlos en la petición de interceder sobre esa situación, debido a que se trata de asuntos que atañen a otros poderes del Estado, sobre los que no puede interferir.
Dos días más tarde, el domingo 22, el jefe del Estado, quien había confirmado su participación en la asamblea general de la ONU, informó de la suspensión del viaje con el argumento de que para el día de su exposición, hoy miércoles, tiene prevista una reunión con el Consejo de Ministros para diseñar el presupuesto del próximo año. El Consejo de Ministros es convocado por el propio Presidente, por lo que no le habría sido difícil posponer la fecha de la reunión.
Aunque esa es la versión oficial de la suspensión, fuentes diplomáticas informaron que aparentemente el presidente Medina recibió informes de que en la Asamblea de la ONU se estarían preparando grupos pro-derechos de los inmigrantes haitianos para presionar a la República Dominicana a que les regularice la situación migratoria, sin tomar en cuenta los mandatos de la Constitución.
El dirigente político y abogado Vinicio Castillo Semán calificó de correcta la posición del presidente Medina de dar una respuesta “políticamente inteligente”, en el sentido de que es a otros poderes del Estado que les corresponde establecer el estatus migratorio de los indocumentados.
La Constitución de la República Dominicana, reformada en el 2010, establece que son dominicanos todos los ciudadanos nacidos en el país que sean hijos de dominicanos y de extranjeros documentados, por lo que los nacidos aquí hijos de padres extranjeros sin documentos se consideran de la nacionalidad de sus progenitores.
El presidente del Senado, Reinaldo Pared Pérez, declaró el mismo día en que el presidente Medina anunció la suspensión de su viaje a la Asamblea de la ONU, que República Dominicana no debe aceptar la “presión internacional de querer imponernos criterios sobre quien es nacional o no”. “La soberanía es nuestra y de más nadie”, dijo Pared Pérez a través de su cuenta de Twitter.
Hace dos semanas el presidente de la Junta Central Electoral, Roberto Rosario, en una entrevista a elCaribe, proclamó que la nacionalidad dominicana no se negocia, en rechazo a las presiones de sectores que buscan la asignación de documentos legales a ciudadanos que de acuerdo con la Constitución no son dominicanos de pleno derecho.
Castillo Semán dijo este lunes en el programa Cara o Cruz que tiene informes de que el Tribunal Constitucional ya tiene lista una sentencia sobre el tema, aunque no conoce el contenido.
Pero de otro lado están las versiones de quienes alegan que si bien es cierto que la Constitución establece la nacionalidad dominicana sólo a los nacidos aquí cuando sus padres están debidamente documentados, en caso de ser extranjeros, su aplicación no debe ser retroactiva, es decir, contra aquellos ciudadanos hijos de haitianos indocumentados, pero que nacieron aquí antes del 2010, año en que entró en vigencia la nueva reforma de la Constitución nacional.
Motivos para no asistir a la ONU
El presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), Manuel Mercedes, informó que el presidente Medina canceló su participación en la asamblea de la ONU porque “le anda corriendo a buscarle una solución al problema que ha creado la Junta Central Electoral a través de la resolución 12-07”, sobre la nacionalidad.
Mercedes sostuvo que esta situación que afecta a miles de hijos de migrantes haitianos “va a llevar al país a una situación más difícil porque ya los organismos internacionales están apoderados de la situación”. Según el activista, el presidente de la República sabía que en dicho escenario se le cuestionaría sobre qué solución tiene el Estado dominicano para buscar una solución a ese problema.
Mercedes habló en el Consejo Nacional de Unidad Sindical (CNUS) donde se anunció la celebración de esta semana como la del migrante y su familia, desde el 23 al 28 de este mes.
El argumento del presidente Medina para no asistir a la asamblea de la ONU fue que hoy miércoles encabezará la reunión del Consejo de Ministros en el Palacio. Precisamente hoy le corresponde a la República Dominicana exponer en ese cónclave. Sin embargo, algunos de sus ministros, como el Administrativo, José Ramón Peralta, viajó a Nueva York desde el pasado viernes como avanzada para la llegada del mandatario. Además del presidente Medina, tampoco asistirá a la asamblea de la ONU el canciller Carlos Morales Troncoso, porque está en un tratamiento de salud.
En tanto que hasta ayer en la tarde el mandatario tampoco había encargado oficialmente a la vicepresidenta Margarita Cedeño de Fernández para que lo represente en el evento.
El procedimiento entonces indica que el país estará representado por el embajador dominicano ante la ONU, Virgilio Alcántara.
Apoyo
Correctísima la posición del Presidente de la Rep. en el sentido de que no le compete a él decidir sobre la nacionalidad de personas”.
Reinaldo Pared Pérez
presidente del Senado de la república.
