El receptor Wilín Rosario se ha ganado el respeto de sus compañeros lanzadores de los Rockies de Colorado dada la forma en que los ha manejado detrás del plato durante esta temporada.Con ello, apunta Rosario, su defensa como receptor también le ha servido para seguirla perfeccionando.
“Es un voto de confianza que me he ganado por parte de ellos”, expresa Rosario en una entrevista concedida a Manny Mota para elCaribe. “Ellos (los lanzadores) quieren que yo esté ahí todos los días. Eso me ha llevado a corregir muchas cosas, entre ellas la defensa detrás del plato por la responsabilidad que ahora tengo gracias a mis compañeros”, agregó.
Un ejemplo de esa consistencia en los abridores de Colorado es Juan Nicasio. Ha sido el catcher titular en las siete salidas que le ha tocado lanzar a su compatriota.
“La comunicación con ellos es más efectiva. Se siente confiado cuando estoy detrás del plato. Eso me llena de satisfacción el que me tomen en cuenta para ser su receptor cuando les toca lanzar”, expuso el jugador de 24 años.
Más tranquilo
La temporada pasada, Wilín Rosario sentía preocupación cuando llegaba al estadio debido a que su nombre, en muchas ocasiones no estaba incluido en la alineación. A pesar de eso, no bajaba la cabeza.
Este año, las cosas son diferentes en el receptor. Desde que inició la campaña, su nombre en la alineación del día no deja de figurar, lo que lo hace comprometerse más con el equipo de los Rockies de Colorado.
“Ahora puedo dormir más tranquilo y a la vez más cómodo”, apuntó Rosario. “Ahora disfruto más en las Grandes Ligas. Ahora no tengo esa presión cuando llegaba al estadio de si iba a estar o no en la alineación. Ahora tengo que estar listo todos los días porque es un compromiso el que tengo en el equipo”, agregó.
Indicó que se considera un jugador de “mucha confianza”, sin importar que en un partido se vaya de 4-0, o que por el contrario conecte cuatro hits en cinco turnos.
“Soy una persona que, aunque me vaya mal en un juego, siempre seré el mismo. Mi plan es tratar de buscar mis ajustes. Este es un deporte de muchos ajustes, en donde cada día se aprenden cosas nuevas y uno tiene que experimentarlas”, dijo Rosario, quien debutó en las Grandes Ligas el seis de septiembre de 2011 con los Rockies.
En ese aspecto, la experiencia obtenida la campaña pasada y los buenos resultados que logró con su ofensiva, en la que registró .270 de promedio al bate, con 28 jonrones, 71 carreras remolcadas, .530 de slugging y .843 de OPS, le han dado la confianza para que, sin descuidar su bateo, se enfoque más en la defensa, el principal reto que tendrá al frente para esta campaña.
“Trato de tomar algo de cada pelotero, tanto como de Troy Tulowitzki, de Carlos González, de Ramón Hernández, de Yorvit Torrealba, de Yadier Molina. De todos los cátchers de las Grandes Ligas yo trato de mirar los videos, porque son peloteros que tienen su estrellado, tienen su nombre, todo el mundo sabe lo qué hacen y eso es lo que venimos trabajando duro”, reveló el dominicano.
En la actualidad, Rosario es comparado con Roy Campanella, un exreceptor que militó por 10 temporadas (1948-1957) con los Dodgers de Brooklyn, demostrando gran destreza defensiva detrás de la caja de bateo.
“Si Dios me dio la bendición de darme por lo menos una cuarta de las bendiciones que Campanella tuvo en esos años, para mi es algo grandioso ser comparado con esa leyenda del béisbol”, sostuvo Rosario, nativo de Bonao.
En la actualidad, Rosario tiene un promedio de bateo de .277, con siete cuadrangulares y 19 carreras remolcadas en 31 partidos.
