Por lo regular, el hombre suele ser mayor que la mujer en una relación de pareja, pues éste, socialmente, se supone ser el protector y proveedor de la familia. Sin embargo, cuando es la mujer quien lleva la “ventaja en años”, la percepción suele ser distinta. Aunque para “el amor no hay edad” y en estos tiempos modernos la gente es cada vez más permisiva y receptiva a los cambios sociales, muchos aún consideran que existen patrones que no deben cambiarse, como por ejemplo, que en una relación el hombre sea quien le lleve un par de años a su pareja.
Esto ya no es la regla. La mujer ha ido dejando a un lado los tabúes y se da la oportunidad de amar y ser amada, sin importar de que quien le haga sentir “maripositas en el estómago” tenga 10 años menos que ella.
Pero… ¿es determinante la edad para el éxito de una relación? Según estudio realizado por la compañía británica Confused, la diferencia de edad perfecta en una relación de pareja es de 4 años y 4 meses, siendo el hombre mayor.
También concluyeron que el 33% de las mujeres señaló que no le importaría que su pareja fuese hasta 7 años mayor, mientras sólo una de cada 100 dijo que quería un hombre más joven.
Para una mujer admitir, abiertamente, que prefiere un hombre más joven no es fácil, ya que suelen objeto de ser juzgada. Comentarios como “está criando un hijo” o “él la dejará en un par de años” surgen de inmediato.
Otro dato que arrojó el estudio es que una cuarta parte de las encuestadas dijeron que si veían a una mujer joven con un hombre mucho mayor, inmediatamente pensaban que era una interesada.
Para el sexólogo Ramón Emilio Almánzar, la deferencia de edad lo que plantea es variedad en las generaciones y las etapas de vida de cada cual. Por consiguiente, si no se toma en cuenta el hecho de que tienen diferentes ideologías generacionales, cada cual querrá imponer en el otro su forma de pensar, lo que tendrá un efecto negativo en la relación.
Es decir, que si la pareja no establece sus normas, probablemente los problemas de convivencia se darán tarde o temprano. Además, de que biológicamente la mujer es más madura es otro factor que puede provocar diferencias entre ambos.
“La mujer madura más temprano que el hombre, lo que la coloca en una posición de más peso respecto a pensar en las cosas de su vida en términos de seguridad existencial”, comenta Almánzar, quien es miembro del Centro Vida y Familia.
También resalta que el aumento de este tipo de parejas (ella mayor que él), se puede deber a que muchas mujeres que ya han pasado por una experiencia matrimonial o que nunca se han casado porque se han dedicado a crecer profesional y económicamente, y luego de cumplir dichas metas se dan la libertad de poder estar con un hombre que sea menor que ellas.
Aceptar el reto
Al preguntarle al especialista sobre los pros y los contras de este tipo de relación, apunta que esto representa más un reto. Pues ambos deben respetar y saber manejar las diferencias de criterios.
“Querer imponer las creencias generacionales y el envejecimiento de la mujer, podría crear tensión entre la pareja, en especial, cuando la mujer comienza a pensar o a ser atacada de que su pareja en algún momento la dejará por una más joven”, dice Almánzar, quien asegura que la clave del éxito de la relación es afrontar todo con madurez.
Tener una relación donde la mujer es mayor que el hombre puede tener un mal pronóstico. Pero Almánzar recomienda que antes de establecerla sentarse a hablar con claridad sobre los temas que pueden traer problemas. Mientas más sinceros, más fácil se les hará superar los obstáculos. “Se debe tener la suficiente madurez para entender que no importa la opinión de los demás, que es una relación decidida de mutuo acuerdo donde el vínculo se relaciona por decisión de la pareja y no por los terceros”, concluye el experto.
El hombre mayor te da estabilidad
Para Almánzar, es un esquema socialmente establecido que el hombre tenga que ser mayor que la mujer para tener una relación. Pero no tiene que ser el patrón a seguir.
“Todavía el hombre en gran parte de la sociedad es quien más trabaja y tiene mayores ingresos, de igual modo tiene un envejecimiento más prolongado que el de la mujer, lo que implica que un hombre de mayor edad puede todavía lucir atractivo”, comenta Almánzar, quien considera que la cada mujer debe decidir con quien quiere estar.
Lo importante es que tenga razones de peso para tener esa persona a su lado y que se sienta querida y respetada. Pero es vital que la mujer tenga en claro que es la pareja del hombre, y no su madre, y que en dicha relación ambos tienen la oportunidad de crecimiento personal.
