Incluso antes de que Riyad Mahrez coronara una contra que dio al Manchester City el pasaje para jugar su primera final de la Liga de Campeones en la historia, el club inglés parecía marchar tranquilo hacia su objetivo.
Y de nueva cuenta, el París Saint-Germain perdió la compostura. Mahrez contribuyó con un doblete para que el City eliminara ayer al PSG con un marcador global de 4-1. Por segundo año consecutivo, el club francés dilapidó una gran oportunidad de conquistar el principal certamen europeo, que se le ha negado en toda su historia. En la edición pasada, perdió la final ante el Bayern Múnich.
Ahora, la final podría ser un duelo de equipos ingleses, si es que el Chelsea se impone hoy al Real Madrid, tras un empate de 1-1. El City ha tolerado una serie de frustraciones antes de llegar al partido por el título principal del continente. Pep Guardiola, el técnico que se coronó en la Liga de Campeones con el Barcelona en 2009 y 2011, ha esperado una década para volver a una final.
