Gennady Golovkin, invicto boxeador nacido en Kazajistán, regresa al cuadrilátero a defender su corona del peso mediano que respalda el Consejo Mundial de Boxeo (CMB).El 18 de este mes, en el Madison Square Garden de Nueva York, tendrá como rival al estadounidense Daniel Jacobs quien ha declarado -y lo ha dicho con firmeza- que demostrará que “no hay enemigos pequeños”.
Se refiere a la incuestionable calidad que tiene Golovkin, pero, afirma, él no es invencible lo que va a demostrar cuando crucen guantes.
Hay que exponer, para que la gente esté bien clara, que esta pelea Golovkin-Jacobs no tiene una ruidosa promoción e incluso seguidores del kazajo como que no le hacen caso a lo que podría pasar en esa pelea.
Pero, ¿por qué? La respuesta es fácil: Porque precisamente hay dos boxeadores (mexicanos) que desde hace varias semanas tienen acaparados a todos los medios noticiosos, especialmente de Estados Unidos y México. Me refiero a Julio César Chávez Jr. y Saúl -Canelo- Álvarez quienes el seis de mayo, en la arena del moderno coliseo T-Mobil de Las Vegas, Nevada protagonizarán un combate que es esperado con alta expectación.
Los fans de Golovkin están a la espera de que su ídolo logre una victoria contundente, como él sabe hacerlo, sobre Jacobs y de esa manera ratificar su estelaridad. Pero más que eso, despertar más el interés que hay de que -este mismo año- firme la pelea con Canelo Álvarez ¡porque todos esperan esa reyerta!
¿Cómo será la pelea?
Golovkin, quien presenta foja sin mácula en 36 visitas al cuadrilátero (36-0) con 33 triunfos por nocaut, es el gran favorito para el pleito con Jacobs. ¿Volverá a propinar un nocaut? Ha noqueado a 23 rivales en forma consecutiva. Sus anteriores 23 combates los ha ganado por la vía del sueño.
Cuando los periodistas lo consultan respecto a cómo terminará su pelea con Jacobs, no responde en forma clara. La mayoría de los expertos cree que tendrá un nuevo triunfo antes del límite.
Veremos si Golovkin vuelve a noquear, pero, como también dicen analistas, no debe subestimar a su joven rival.