Santiago. El desborde del sistema cloacal y de los imbornales afecta a varias comunidades del sector Cienfuegos, mientras las protestas por agua potable se recrudecen en barrios de la provincia.
En la mañana del jueves, manifestantes quemaron neumáticos y lanzaron escombros para demandar de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santiago (Coraasan) corregir los problemas de desbordamiento de cloacas en la calle principal de los 30 Caballeros en Cienfuegos.
Mientras que en el barrio La Gloria, el infierno es permanente, según dicen sus moradores, con el desborde de las aguas pestilentes de los imbornales. Israel Valdez, presidente de la junta de vecinos, dice que llevan años demandando de la alcaldía de Santiago de los Caballeros que corrijan la problemática. “Aquí la gente amanece con Vicks VapoRub en la nariz debido al hedor que se desprende y los problemas que esto causa a la salud”, expresa Tomás Ramírez residente en La Gloria.
En tanto, que los moradores de la calle nueve de Cienfuegos denuncian que con el abandono de los trabajos que hace un tiempo inició la Coraasan, además de dejar totalmente deteriorada la calle 30 Caballeros, la cloaca se desborda en toda la vía.
A las quejas por las aguas negras se suman las protestas en comunidades de la parte sur, que desde el pasado lunes han quemado neumático y obstaculizado las calles en los sectores Palo Samarillo y La Jagua, en el trayecto desde Santiago de los Caballeros hasta el municipio de Baitoa. Sus moradores dicen que llevan un mes sin recibir el vital líquido. Las quejas por falta de agua se extienden a varias comunidades de la parte norte y el sur, que advierten reducción de servicio.
La semana pasada la Coraasan dijo que la producción de agua era estable y que se mantenía en 116 millones de galones por día, es decir, dos millones más que hace tres años, cuando apenas era de 114 millones. Sin embargo, siempre ha existido déficit porque el acueducto hace tiempo agotó su vida útil.
