El chofer de carro público, Sandy Rojas, a quien el mambero Antonio Peter de la Rosa, mejor conocido como “Omega”, amenazó con arma eléctrica en plena vía pública no levantará ningún tipo de denuncia.
Rojas acudió la mañana de ayer al Palacio de la Policía Nacional, acompañado del abogado Félix Portes, quien representa al artista. De ahí ambos se trasladaron a la Fiscalía del Distrito Nacional para formalizar el incidente.

“No hay ningún tipo de querella, es formalizar la denuncia con relación al incidente y de nuevo regresamos para acá (Palacio de la Policía)”, explicó Portes, quien dijo que lo importante es que todo se va a resolver.

Calificó la situación como “un cruce de palabras” que no tiene que ver con Derecho Penal. Rojas se limitó a decir que entre Omega y él solo se produjo un intercambio de palabras, mientras Portes le instaba a que “no diga más nada”.

El controversial artista no acudió a la Policía pese a que se esperaba su asistecia.

Pistola eléctrica

El arma que utilizó el mambero Antonio Peter de la Rosa, mejor conocido como “Omega”, al momento de acercársele a un chofer del trasporte público no es de fuego, sino, eléctrica.

Así lo afirmó una fuente cercana al artista al recordar que por su condición judicial (libertad condicional) está impedido de usar arma de fuego.

La ira de “El Fuerte” se desató tras un roce que se produjo entre el carro de Sandy Rojas, un Toyota verde, cuya placa no se puede leer en el video que circula en las redes sociales y la yipeta Maserati, blanca, placa G 422321, de Omega.

Ante este hecho de violencia, la Policía Nacional llamó ayer al responsable a entregarse por la vía que entienda pertinente.
Faltando apenas 25 días para que Omega cumpla la libertad condicional que le fue impuesta por violencia de género, el artista se ha visto envuelto en este escándalo que lo llevó a entregarse por ante el Palacio de la Policía Nacional pasado el mediodía.

En libertad condicional

En septiembre del año 2016 el intérprete de “Llorarás”, “Ratata” y “Chorro ‘e loco”, entre otros fue condenando a cinco años de prisión, suspendidos a cuatro años y cuatro meses, por golpear a su expareja en presencia de sus hijos.

Después de haber cumplido la mitad de su condena y tras conocer un recurso de Habeas Corpus, la magistrada Marleny Altagracia Santos, de la primera sala penal de la provincia Santo Domingo, ordenó, en diciembre del 2018 la libertad del artista.

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