Aunque los infartos siguen teniendo una prevalencia entre los adultos mayores, cada vez más ocurren en jóvenes

Lamentablemente, “las enfermedades cardiovasculares han aumentado a nivel mundial de manera significativa”, aseguró el director de la Asociación del Instituto Dominicano de Cardiología, Josué Pichardo.

Éstas en años anteriores reflejaban un número por encima de los 45 años en las mujeres y por encima de los 55 en hombres, pero la mujer es la más propensa a padecerlas. “Eso ha cambiado y cada vez hay más jóvenes hipertensos, diabéticos, y que hacen infartos. Entonces, no hay dudas de que esa población joven de enfermos a nivel mundial ha ido aumentando”.

Para Pichardo, ahí entra en juego una serie de condiciones y de factores de la vida moderna que pudieran estar incidiendo. “Europa tiene una población de personas mayores comparada con Dominicana que tiene un espacio de edad mucho más joven. De cada 6 hombres que mueren en Europa, uno es por un infarto. Mientras que 1 de cada 7 mujeres que muere tiene una enfermedad relacionada con la patología cardiovascular”, dijo el galeno destacando que una de las causas de incidencia es que tienen una gran población de fumadores.

“Lo que está pasando en Dominicana es que hay muchas personas que también fuman. Ahora hay una tendencia casi generalizada entre la juventud que quien no tiene un “vape”(cigarrillo electrónico) en la boca no está a la moda”.

De acuerdo con el doctor, los jóvenes entienden que esto no trae problemas de salud, “pero si lees cualquiera de los envases y buscas la carga de nicotina te das cuenta de que es elevada. Ellos creen que es tan inocuo que no les va a hacer nada, y se están cargando de sustancias nocivas que van a producir daños a nivel del endotelio, hipertensión, endurecimiento arterial y otros”, advirtió Pichardo.

Al mismo tiempo cuestiona, ¿qué esperas de un muchacho que empiece a fumar a los 16 años?, “que en dos o tres años tenga daños a nivel pulmonar y en su sistema arterial que, lamentablemente, lo va a llevar a una situación delicada”.

En pacientes jóvenes existen factores recientes identificados, por ejemplo, vasoespasmo; que se cierra la arteria sin estar enferma de manera abrupta, destacó.

También pacientes que tienen enfermedad arteroesclerótica acelerada, pero, además, se juntan una serie de factores de riesgo que han sido identificados recientemente o que han sido utilizados por la juventud: fumar, sobrepeso, sedentarismo, la enorme carga de estrés, y todos inciden en que cada vez más personas jóvenes tengan enfermedad coronaria.

“Si eres un joven sano tengo que identificar cuáles factores de riesgo tienes para desarrollar una enfermedad cardiovascular. Existen los scores de riesgo que de acuerdo a la edad, sexo, niveles de presión arterial, colesterol, triglicéridos, dan las probabilidades de enfermedad a los cinco o diez años. Por lo tanto, si se determina que fumas, tienes el colesterol elevado, eres diabética, hipertensa… todos son factores en los que se puede intervenir”, resaltó.

Asimismo, señaló: “Le digo al paciente que deje de fumar; que comience a caminar, etc, y vuelvo y le aplico el mismo score en cinco años. Tu probabilidad de muerte de 10 por ciento puede bajar a cuatro por ciento”.

Controlables y no intervenibles

Los factores de riesgo que son controlables, según Pichardo, son: el peso, el estrés, la presión arterial, la diabetes. Mientras que hay otros que no son intervenibles desde el punto de vista médico: el sexo, la edad, la herencia, la etnia. Por lo tanto, van a seguir incidiendo sobre la enfermedad cardiovascular a lo largo de tu vida. “No existe una forma de prevención 100 por ciento, pero sí existe la forma de bajar la incidencia porcentualmente”.

Programa cero tabaco

Según Pichardo, la Sociedad de Cardiología tiene varios años con programas de cero tabaco en lugares públicos cerrados como restaurantes. “En la mayoría de lugares existe la prohibición, pero la población joven aún no tiene la conciencia de cuál es la situación. Estamos en desventaja por la falta de difusión de manera general. Creo que nos falta difundir estas informaciones, para que los jóvenes no digan ahí vienen hablarme mal de que no haga lo que me gusta. Hay que hacer conciencia”.

Prevención primaria

El galeno sostuvo que el control de factores de riesgo en prevención primaria es ideal, “el problema está en que lamentablemente esperamos estar enfermos para ir al médico”.

Al momento de ocurrir un infarto entonces se debe hacer prevención secundaria. “Si ya tengo factores de riesgo identificados, incluyendo el infarto, hay que ser más agresivo en las intervenciones”, comentó.

Tanto las guías nacionales como las internaciones te dicen: “deje de fumar”, porque hay un daño claro, específico y evidente, de que la nicotina produce una alteración a nivel del endotelio vascular, donde se producen algunas sustancias que son vasos dilatadoras, señaló Pichardo. “ Está demostrado que la nicotina daña esas célula”, puntualizó.

El doctor advirtió que de seguir fumando la intervención para mejorar el riesgo como prevención secundaria se complica.

Posted in Estilo

Más de gente

Más leídas de gente

Las Más leídas