Anuncio de ruptura de contratos con empresa Odebrecht; declaración ante ONU de que “no hay ni habrá solución dominicana a situación Haití”; fracaso convocada protesta en Plaza de la Bandera y, finalmente, retiro de los impuestos para 2021. Con esas noticias, esta semana concluyó favorablemente para el presidente Abinader. Particularmente la declinación presidencial a la idea, fuertemente rechazada, de nuevos gravámenes, por “escuchar” al pueblo, me sorprendió muchísimo. Dada la experiencia de nuestros gobiernos siempre salirse con la suya y contra toda oposición aplicaron iniciativas impositivas ante las cuales todos debimos resignarnos, preferí ser pesimista. Vi inevitable otro golpe en un grado u otro. Felizmente me equivoqué; el mandatario midió el impacto político del generalizado disgusto y fue cautelosamente distinto. Saludamos.

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