Lo que ha ocurrido con las reacciones del poder contra la sentencia del Tribunal Superior Electoral (TSE) resulta desconcertante, igual que las revelaciones de que el presidente de esa corte fue sometido a fuertes presiones directamente de parte de funcionarios del gobierno para que influyera en la variación de dicha sentencia. El contenido de la decisión podrá ser criticado, está sujeto a interpretaciones, y puede ser todavía recurrido al Tribunal Constitucional. En cualquier caso, es esencialmente un problema de los militantes y dirigentes del PRD, que deben agotar los procedimientos previstos en la ley. Por eso, la petición del presidente del Senado a la Cámara de Diputados para que investigue a tres miembros del TSE es alarmante.
Alarmante
Lo que ha ocurrido con las reacciones del poder contra la sentencia del Tribunal Superior Electoral (TSE) resulta desconcertante, igual que las revelaciones de que el presidente de esa corte fue sometido a fuertes presiones directamente de parte de funcionarios del gobierno para que influyera en la variación de dicha sentencia.