Al iniciarse el año electoral, dos hijos de expresidentes de la República, postulados por sus respectivos partidos, arrancan como favoritos para conseguir los dos principales cargos electivos del Distrito Nacional. Carolina Mejía, actual alcaldesa del Distrito Nacional, es hija de Hipólito Mejía y hasta ahora se ve como una línea para repetir en el cargo en las elecciones municipales del 18 de febrero, mientras que Omar Fernández , hijo del tres veces presidente Leonel Fernández, tiene amplias posibilidades de convertirse en senador, aunque el certamen en el que le tocará participar está más distante y aún no se sabe oficialmente quién será su contendor.
Caso Carolina
Los políticos del patio casi siempre les caen atrás a las candidaturas, pero excepcionalmente ocurre lo contrario. Es decir, que las candidaturas les caen atrás a determinadas figuras, que fue lo que pasó en el caso de Carolina Mejía, quien hasta pocas horas antes del vencimiento del plazo para depositar las nominaciones en el nivel municipal mantenía resistencia a postularse. El asunto se vio claro desde temprano. El slogan “Ella es”, que la anunciaba en el proceso del 2020 cobraba ahora mucho más sentido, porque todos los caminos conducían a ella, aunque el PRM tenía varias opciones para competir con posibilidades. Neney Cabrera, Alberto Atalllah, Orlando Jorge Villegas y Aníbal Díaz lo intentaron, pero fueron cediendo, no tanto por debilidades de ellos, sino por las fortalezas de la alcaldesa, dentro y fuera de la organización. En febrero, le tocará competir con un Domingo Contreras que se ha preparado para ser alcalde, aunque no ha tenido suerte para lograrlo. El punto fuerte de su contrincante es que se logró la alianza PLD-FP-PRD, pero con todo y eso, las apuestas siguen favoreciendo a la dueña del cargo. Para vencerla, hará falta algo más que “acusarla” de que no quiere ser la alcaldesa, que es hasta ahora, el principal argumento de sus opositores.