Caminar por fe es ir por senderos desconocidos a un final preparado por Dios pero que sabes en lo profundo de tu ser que contiene tus anhelos más preciados. Caminar por fe es avanzar desde la mente, renovarla espiritualmente para que lleve tus pies sin distracciones. No siempre sabremos cómo Dios conecta las cosas, teje los mundos, trae alineamiento al corazón y entrelaza las circunstancias, aún en las temporadas de retrasos como en los momentos de señales puntuales; Dios no deja de obrar como Dios, es el alfa y la omega del trayecto, tiene control total. Caminar por fe no es lo más fácil pero sí lo más seguro, porque no se trata de las condiciones del camino sino de que «Dios mismo» es quien te acompaña a tu destino.

Posted in Rosas para el alma

Más de opiniones

Más leídas de opiniones

Las Más leídas