Desde niña escuchaba de mi profesora de primaria esta frase maestra: “Insiste, insiste y persiste, en eso el triunfo consiste”. Tantas veces lo decía entre asignaturas y consejos que con los años se quedó entre mis venas.
Terminé comprendiendo que quienes se proponen triunfar, se proponen también nunca rendirse. Estar determinados ante el éxito es más importante que estar destinados a Él, por tanto resistir siempre nos llevará más lejos que insistir. Así pues, cuando llegar no esté totalmente en tus manos, orar es la clave para lograrlo todo, pues muchas veces lo damos todo, pero a cambio de “nada”. No obstante, con Dios todo es posible, lo que es imposible es el éxito sin Dios, los hombres, aún los más avezados, harán solo hazañas, Dios, en todo tiempo, “milagros”.

Posted in Rosas para el alma

Más de opiniones

Más leídas de opiniones

Las Más leídas