Las Reuniones Anuales del FMI y el Grupo Banco Mundial (GBM), que empezaron ayer, serán presenciales. Es un elemento nuevo, luego de la pandemia, pero ese elemento quizás quede relegado a un segundo plano por otro tema: las subidas de tasas de interés.

A finales de septiembre la Reserva Federal (Fed) estadounidense volvió a subirla, dirección que empezó hace 6 meses al elevar los tipos de interés hasta que la inflación esté controlada.

Pero es un tema que sigue generando discusión en gran parte del mundo, porque las elevaciones de tasas no han colocado el freno a la inflación con la fuerza que se esperaba. De hecho, los precios no han parado de subir.

En un país escalan más que en otro, pero en definitiva, estáticos no se han quedado.

La más reciente medida de la FED aumentó en 0.75 puntos la tasa de interés, la quinta desde marzo. Y al hacerlo fue bastante clara.

“Anticipamos que serán adecuados más aumentos de tipos en el futuro”, dijo en una rueda de prensa en septiembre el presidente de la FED, Jerome Powell, poco después del anuncio del alza.

Ha sido la tercera consecutiva de tres cuartos de punto y eso sigue generando temores. Unos temores que se trasladan a otras naciones con las que Estados Unidos tiene relaciones comerciales.

Los bancos centrales de todo el mundo han estado incrementando sus principales tasas de interés, en lo que ha sido visto por economistas como el mayor endurecimiento de la política monetaria que se ha registrado.

Incluso, algunos de esos profesionales de la economía han emitido un “cuidado”, en alusión a que los bancos podrían estar yendo demasiado lejos, especialmente si no se toma en cuenta su impacto colectivo en la demanda mundial.

El propio Banco Mundial (GBM) ha dicho que “el número de alzas de tipos de interés anunciadas por los bancos centrales de todo el mundo fue el mayor en julio de 2022, desde que se iniciaron los registros, a principios de la década de 1970”.

Paises con alzas de tipo de interés

Indonesia, Noruega, Filipinas, Sudáfrica, Suecia, Suiza, Taiwán y Reino Unido también subieron los tipos.
Un poco más cerca, en el Continente Americano, y muy especialmente en América Latina, los incrementos han estado presentes en esta proporción: Argentina subió la tasa de referencia en 75.00 %, Brasil (13.75 %), Chile (10.75 %), Uruguay (10.25 %), Colombia (10.00 %), México (9.25 %), Costa Rica (8.50 %), Paraguay (8.50 %), República. Dominicana (8.25 %), Perú (6.75 %), Nicaragua (6.00 %) y Guatemala (3.00 %).

Han colocado las tasas por encima de los niveles previos a la pandemia de covid-19. “El peligro de hoy… no es tanto el hecho de que las medidas actuales y planificadas no consigan finalmente controlar la inflación”, escribió en septiembre Maurice Obslfeld, antiguo economista jefe del Fondo Monetario Internacional (FMI), en una nota para el Peterson Institute for International Economics, donde es investigador principal.

“El peligro es que colectivamente vayan demasiado lejos y lleven a la economía mundial a una contracción innecesariamente dura”, agregó, según una publicación del portal Finte Chile.

Ayer, la directora del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva, advirtió que el riesgo de que haya una recesión mundial ha subido y que ahora el mundo ha entrado en una época de “fragilidad y volatilidad”.

Según los cálculos de la ejecutiva, alrededor de un tercio de la economía mundial tendría al menos dos trimestres consecutivos de crecimiento negativo este año o el próximo año.

La visión de Georgieva y lo que piensa Malpass

La directora del FMI habló del riesgo de una recesión en una charla en la que estuvo acompañada del presidente del Banco Mundial (BM), David Malpass, que marcó el comienzo de las Reuniones Anuales de 2022 de ambos organismos en Washington, donde los principales líderes económicos discutirán las perspectivas económicas mundiales hasta el domingo 16.

Malpass advierte que los niveles de deuda de los países en desarrollo “se están volviendo cada vez más onerosos” y que el aumento de las tasas de interés le agrega peso a lo grave de la situación, igual que las altas tasas de inflación.

“Con 70 millones más de pobres, según muestra el último análisis del BM, y una reducción del 4 % en el ingreso medio, nuestro objetivo de prosperidad compartida, no está sucediendo y están ocurriendo reversiones en el desarrollo”, agregó Malpass.

Kristalina Georgieva, en una ponencia en la Universidad de Georgetown, Washington, DC, el 6 de octubre ya había hecho otros planteamientos.

“Nuestra economía mundial parece un barco en aguas turbulentas. Por tanto, necesitamos toda la sabiduría a nuestro alcance para estabilizar el barco y llevarlo a un puerto seguro”, indicó al amplio auditorio que la escuchó.

Posted in Dinero

Más de panorama

Más leídas de panorama

Las Más leídas