Los ataques entre Israel e Irán continuaron este lunes por cuarto día consecutivo y dejan ya más de 220 muertos iraníes y 24 israelíes, así como centenares de heridos, en una escalada de tensión que no tiene visos de frenarse.
“Irán no está ganando esta guerra” con Israel, dijo este lunes el presidente estadounidense, Donald Trump, quien consideró que los dos países “tienen que llegar a un acuerdo” y, aunque “es doloroso para las dos partes”, deberían a su juicio “hablar inmediatamente antes de que sea demasiado tarde”.
Sin embargo, las dos partes no rebajan el tono beligerante. El presidente iraní, Masud Pezeshkian, aseguró que Teherán enviará una respuesta “más dolorosa” y “más dura” si EE.UU. no contiene a Israel, mientras que para el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, acabar con el líder supremo de Irán, Ali Jameneí, es lo que pondría fin al conflicto, según afirmó en una entrevista con la cadena estadounidense ABC News.
“Haremos lo que sea necesario”, afirmó asimismo Neganyahu en una rueda de prensa esta noche, al ser preguntado sobre la posibilidad de matar a Jameneí, y se mostró dispuesto a proseguir en una guerra para la que Israel lleva “meses” preparándose.
Teherán bajo fuego
La realidad sobre el terreno es compleja: Israel amaneció con ocho nuevos muertos, tras ser hallados los cuerpos de tres personas en Haifa (norte) y el cadáver de un hombre de unos 80 años cerca de Tel Aviv, lo que eleva el total a 24 desde los primeros ataques de Irán el viernes por la noche.
Aunque las víctimas iraníes son más. La portavoz de su Gobierno, Fatemeh Mohajerani, afirmó este lunes que 45 niños y mujeres han muerto y 75 resultaron heridos en la “guerra” que Israel comenzó con los ataques en la madrugada del viernes.
Mohajerani no proporcionó datos totales de las muertes en los bombardeos, pero ayer el ministerio de Salud informó de 224 muertos y 1.257 heridos en todo el país.
Este lunes, Israel atacó Mashhad, una ciudad en el este de Irán, y un barrio residencial de la capital, Teherán, donde las bombas israelíes tuvieron entre otros objetivos la sede central de la radiotelevisión pública iraní (IRIB), que se encuentra en la zona con unas amplias oficinas contiguas a una mezquita y cerca de un centro de inteligencia.
El momento del ataque quedó capturado en directo ante la cámara mientras una presentadora de IRIB hablaba en directo y la retransmisión se iba a negro. Pocos minutos después, la presentadora, Sahar Emami, a la que los medios oficiales ya han convertido en heroína y el propio Jamenei ha alabado, volvió al estudio.
El portavoz del Ministerio de Exteriores iraní, Ismail Baghaei, condenó el ataque alegando que atacar la oficina de la radiotelevisión pública durante una emisión en directo es un acto perverso de crimen de guerra”, mientras que el ministro de Defensa israelí, Israel Katz, calificaba a IRIB como “la autoridad de difusión de propaganda e incitación del régimen iraní”.
Ante esta escalada, las peticiones internacionales siguen siendo para rebajar la tensión. Desde Trump, con su llamamiento en la Cumbre del G7 en Canadá a “hablar inmediatamente antes de que sea demasiado tarde”, hasta el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, quien ofreció a Pezeshkian actuar como intermediador con Israel para acabar con el conflicto.
El petróleo de Texas baja un 1.66 por ciento
El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) cerró este lunes con una bajada del 1.66 %, hasta 71.11 dólares el barril.
Al cierre de la jornada en la Bolsa Mercantil de Nueva York, los contratos de futuros del WTI para entrega en julio bajaba 1.21 dólares con respecto al cierre de la sesión anterior. El viernes, el precio del WTI cerró con una subida del 7.26 %, hasta 72.98 dólares el barril.