Quito, 12 dic (EFE).- Cuatro niños de edades entre los 5 meses y 7 años fueron asesinados y sus padres resultaron heridos en una masacre ocurrida en una vivienda de un populoso barrio de la ciudad ecuatoriana de Guayaquil, según confirmó este martes la Fiscalía, que abrió una investigación de oficio.
El crimen, que puede deberse a una equivocación de los asesinos, se registró en la noche del lunes en el Guasmo Sur, una zona del sur de la portuaria capital de la provincia costera de Guayas, donde se han vuelto recurrentes los episodios de violencia, atribuidos principalmente a las bandas criminales que operan en la zona.
En torno a las 21:00 hora local del lunes (2:00 GMT del martes) irrumpieron en la vivienda hombres armados que dispararon indiscriminadamente contra los habitantes del inmueble.
En una comparecencia ante periodistas, el comandante de la Policía en el Distrito Metropolitano de Guayaquil, Víctor Herrera, explicó que es probable que los atacantes se hayan equivocado de vivienda y que en realidad buscasen atacar a los habitantes de un inmueble adyacente donde, al allanarlo, encontraron elementos utilizados para posibles atentados, como mecha lenta.
Herrera detalló que entre los niños asesinados había un bebé de 5 meses, mientras que los otros tenían 3, 6 y 7 años.
Los padres se encuentran hospitalizados tras haber sido trasladados a un centro médico. La madre tiene pronóstico reservado.
“Lo ocurrido con los cuatro niños en Guayas no puede sernos indiferente. Es desgarrador que, cuando las estructuras criminales no logran sus objetivos, la violencia escale a este nivel”, advirtió en un mensaje en redes sociales la fiscal general, Diana Salazar.
Ecuador atraviesa la peor crisis de inseguridad ciudadana de su historia, con una ola de violencia criminal vinculada a las mafias del narcotráfico y del crimen organizado que han ganado poder en los últimos años.
La tasa de homicidios se ha quintuplicado casi en los últimos cinco años, al pasar de 5,8 a 25,62 muertes violentas por cada 100.000 habitantes, mientras que algunos expertos anticipan que el 2023 se cerrará con una tasa de 40, lo que pondría a Ecuador entre los países más violentos de Latinoamérica. EFE