ESCUCHA ESTA NOTICIA
|
Washington, 12 sep (EFE).- La vicepresidenta de Estados Unidos y candidata demócrata, Kamala Harris, insistió este jueves en su propuesta de celebrar un segundo debate con su rival republicano, el expresidente Donald Trump (2017-2021), a pesar de que este ha rechazado participar en un nuevo cara a cara.
“Hace dos noches Donald Trump y yo tuvimos nuestro primer debate. Y creo que le debemos a los votantes tener otro porque estas elecciones y lo que está en juego no puede ser más importante”, expresó durante un mitin en Charlotte (Carolina del Norte).
Ambos tuvieron su primer debate televisado el martes por la noche en Filadelfia, donde Harris se impuso con una imagen sosegada y presidenciable frente a un Trump iracundo que fue interrumpido varias veces por los moderadores para desmentir sus bulos.
El magnate neoyorquino, que en junio ganó con claridad el debate con el presidente, Joe Biden, forzando su salida de la carrera electoral, anunció este jueves que no se prestará para un tercer cara a cara con los demócratas.
Durante su mitin en Carolina del Norte, uno de los estados decisivos para las elecciones del 5 de noviembre, la vicepresidenta rememoró varios momentos del debate y se burló de Trump por haber dicho que tiene “un concepto de plan” para la sanidad pública.
A pesar de su buen desempeño en el cara a cara, Harris advirtió que las presidenciales estarán “muy ajustadas” y que los demócratas están en “desventaja” en esta carrera porque Trump tiene el apoyo de varios grupos de poder.
Migración y aborto dominaron debate Trump-Kamala
Trump inició el debate entre él y la vicepresidenta, Kamala Harris, con una arremetida contra los migrantes y afirmó que están “robando” los trabajos a afroamericanos e hispanos, un comentario de tono racista que la demócrata calificó como “la misma retórica desgastada de siempre”.
El debate, el primero entre ambos, comenzó con preguntas sobre el estado de la economía, pero Trump rápidamente desvió la conversación hacia la migración, y aseguró falsamente que hay “millones” de personas que están “inundando” Estados Unidos.
Trump acusó a los inmigrantes que llegan a Estados Unidos de comerse los perros y los gatos de los ciudadanos que viven en las ciudades fronterizas, ante una atónita Harris.
Mientras Trump hablaba, Harris negaba con la cabeza en señal de desaprobación y, dirigiéndose directamente a la cámara y a los estadounidenses que seguían el debate, afirmó: “Esta noche van a escuchar lo mismo de siempre: un montón de mentiras, agravios y descalificaciones”.