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Saná, 30 ago (EFE).- El enviado especial de Naciones Unidas para el Yemen, Hans Grundberg, dijo este viernes que es «inaceptable» que 13 empleados de la organización sigan detenidos por los rebeldes hutíes desde junio y pidió su liberación inmediata tras mantener conversaciones con varias partes del conflicto.
«Es inaceptable atacar, arrestar o detener al personal de Naciones Unidas mientras cumple con su mandato», dijo Grundberg en un comunicado en el que pidió la «liberación inmediata» de estos trece trabajadores, arrestados por los hutíes en Saná, la capital yemení controlada por los rebeldes.
En las últimas semanas han circulado por internet videos en los que algunos de los trabajadores detenidos son presuntamente obligados a confesar acusaciones, entre ellas de espionaje.
Además de estos empleados de la ONU, se estima que otros 14 trabajadores de diferentes organizaciones humanitarias están detenidos en Yemen por los hutíes.
Por otra parte, Grundberg también abordó «los esfuerzos en curso para reducir la escalada del conflicto en el Yemen», en guerra desde 2014, y en «la necesidad de permitir que se rescate al dañado ‘M/T Sounion’, el petrolero griego atacado por los hutíes la semana pasada que sigue ardiendo en el mar Rojo con 150.000 toneladas de crudo a bordo.
En los últimos días, el responsable de la ONU se ha reunido con responsables del Gobierno internacionalmente reconocido del Yemen en Adén; con el portavoz político de los hutíes, Mohamed Abdelsalam, en Mascate (Omán); y en Riad con el embajador de Arabia Saudí en el Yemen, Mohamed al Jaber, de acuerdo con el comunicado.
El movimiento insurgente hutí, respaldado por Irán, tomó en 2014 Saná y desde entonces se hizo con amplias zonas del norte y el oeste del país, donde siguen librando una guerra contra las fuerzas del gubernamentales.
De acuerdo con la ONU, más de 18 millones de personas sufren las consecuencias de la inseguridad alimentaria, epidemias, desplazamientos forzados y daños a la economía e infraestructuras fruto del conflicto yemení, que está a punto de cumplir una década de hostilidades. EFE