Ginebra, 22 feb (EFE).– El ataque armado a gran escala de Rusia contra Ucrania, que está a punto de entrar en su tercer año, ha tenido un coste humano “espantoso” y sigue causando violaciones “graves y generalizadas” de los derechos humanos, destruyendo vidas y medios de subsistencia, subrayó este jueves la ONU.
Al menos 10.582 civiles han perdido la vida desde el comienzo de la invasión rusa en febrero de 2022 y otros 19.875 resultaron heridos, de acuerdo con el último informe de la Misión de la ONU en Ucrania, con lo que el número total de personas afectadas asciende a 30.457 cuando se cumplen dos años de conflicto.
El informe apunta que, aunque el número de víctimas civiles alcanzó sus máximos niveles en los primeros meses después del ataque armado y disminuyó gradualmente a lo largo de 2022 y 2023, siguió siendo alto, con un promedio de 163 civiles muertos y 547 heridos al mes el pasado año.
“El impacto a largo plazo de esta guerra en Ucrania se dejará sentir durante generaciones”, aseguró en un comunicado con ocasión del aniversario de la guerra el alto comisionado de Naciones Unidas para los derechos humanos, Volker Türk.
Según las informaciones recibidas por su oficina, durante estos dos años se han documentado torturas, malos tratos y detenciones arbitrarias generalizadas de civiles a manos de las fuerzas armadas rusas en los territorios ucranianos ocupados.
Asimismo, la misión de la ONU en Ucrania ha constatado graves violaciones de los derechos humanos y del derecho internacional humanitario cometidas durante este bienio por parte del Ejército ruso tras entrevistar a más de 500 exprisioneros de guerra y detenidos civiles ucranianos.
Türk también recordó que su oficina ha documentado violaciones cometidas por el ejército y los cuerpos de seguridad ucranianos aunque, aseguró, “de un alcance muy inferior a las perpetradas por las fuerzas rusas”.
En este contexto, instó a Ucrania a cumplir con sus obligaciones para con los derechos humanos y destacó que colabora de forma continua con las autoridades ucranianas para abordar estas cuestiones.
El alto comisionado austriaco aseguró que la guerra en Ucrania ha empeorado la “ya grave” situación de los derechos humanos en la península de Crimea, territorio al sur de Ucrania anexionado a Rusia en 2014 pero reconocido por la ONU como territorio ucraniano.
Por último, reiteró su llamamiento para que se investiguen de forma “exhaustiva e independiente” todas las violaciones de derechos humanos denunciadas y para que se garanticen la rendición de cuentas y la reparación a las víctimas. EFE