Washington, DC. El presidente estadounidense, Donald Trump, aceptó anoche la nominación del Partido Republicano para optar a un segundo y último mandato presidencial en las elecciones del 3 de noviembre, en las que se enfrentará al aspirante demócrata, el exvicepresidente Joe Biden.
“Con el corazón lleno de gratitud y un optimismo sin límites, acepto profundamente esta nominación para la Presidencia de Estados Unidos”, dijo Trump en su discurso ante la Convención Nacional Republicana, pronunciado en directo en el jardín sur de la Casa Blanca ante alrededor de 1,500 personas, sentadas en sillas juntas y sin apenas mascarillas.
Ivanka Trump presentó a su padre Donald Trump, quien habló desde el jardín sur de la Casa Blanca, acto que muchos entienden que viola la Ley Hatch, una legislación de 1939 que limita las actividades políticas de los empleados de gobierno.
Trump acudió al miedo como estrategia y señaló los peligros que representan el socialismo, la anarquía, el comunismo, la izquierda radical, la invasión de inmigrantes indocumentados, a tener de vecinos a pandilleros de la MS-13, a los movimientos violentos en defensa de los derechos civiles.
En ese sentido Trump enfocó su discurso a la agenda “extremista” del exvicepresidente Joe Biden y colocó la suya en el otro polo.
Trump dijo que si Biden es elegido llevará a la Casa Blanca un “movimiento represor” y “socialista” que “demolerá” el destino de EEUU y el sueño americano.
Poco antes el vicepresidente Mike Pence calificó a Biden como “el Caballo de Troya de la izquierda radical” y asestó: “La elección en este proceso nunca ha sido más clara y lo que está en juego nunca ha sido tan grande… Joe Biden pondría a Estados Unidos en un camino de socialismo y declive, pero no vamos a dejar que eso suceda”.
Grupos llamaron a protestar contra Trump
Varias protestas fueron convocadas anoche en Washington DC con motivo del discurso de Trump desde la Casa Blanca para aceptar la nominación republicana a los comicios de noviembre. Durante el discurso se escuchaban los gritos y abucheos de la agitación social que se ha avivado después de que un policía disparara siete veces por la espalda a un hombre negro en Kenosha.
