Autoridades desmantelaron ayer una red que se dedicaba al robo, distribución y venta de piezas de repuestos de vehículos en distintos sectores del Distrito Nacional y arrestados tres cabecillas vinculados a esa actividad ilícita.
Durante la operación fueron arrestados Edward Pérez y su pareja Massiel Acevedo, y el señor Elmer Encarnación, alias El Barón, quienes trabajaban con decenas de ladrones de repuestos y que serán sometidos a la justicia en las próximas horas, solicitando medidas de coerción en su contra por dedicarse a esa práctica ilícita.
La labor de inteligencia incluyó el seguimiento a los ladrones con vídeos, el uso de agentes encubiertos y la vigilancia y el seguimiento constante a los negocios, lo cual permitió identificar cuatro comercios en el sector Villa Juana que se dedicaban a esa actividad y apresar a los principales coordinadores y ladrones de retrovisores, parrillas y tapa bocinas de la zona.
Los negocios dedicados a ese tipo de actividad ilícita fueron identificados como Repuestos JR, ubicado en la calle Moca esquina Américo Lugo No.137, Villa Juana; Francis Vidrio, ubicado en la Calle Arturo Logroño; Auto Electrónica Triple A, calle Moca No. 136, y Repuestos Josué Auto Parts, ubicado en la calle Pedro Livio Cedeño esquina calle Seibo, todos localizados en el sector de Villa Juana, del Distrito Nacional, en los cuales se ocuparon miles de piezas robadas.
En relación al operativo, la Procuraduría General informó que contó con la participaron de unos 16 fiscales y 21 agentes de la Unidad de Investigaciones Criminales, 60 agentes policiales y 40 de la Fuerza de Tarea Conjunta Ciudad Tranquilla.
Según el informe, la organización utilizaba el modo de valerse de los denominados “taxistas”, que son reconocidos delincuentes que se dedican a sustraerle piezas a vehículos que se encuentran estacionados en lugares públicos y residencias.
Posteriormente, las piezas eran llevadas a determinados “Repuestos” en la zona de Villa María, Villa Consuelo y Villa Juana, entre otros sectores pertenecientes al Distrito Nacional, en donde se insertaban y vendían al público como “piezas usadas”, y producto de la actividad ilícita a la que se dedican han logrado beneficiarse de un considerable patrimonio ilícito.
