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La familia de Fausto Miguel Cruz, confeso asesino del ministro Orlando Jorge Mera, emitió este miércoles un comunicado en el que lamentan la situación y apelan al perdón, que previamente habían expresado los parientes del funcionario.
“Es una inmensa tragedia para ambas familias, que se trataban con bastante cercanía por décadas. La muerte de Orlando, no solo es una pérdida para su familia. Lo es también para la familia de Fausto Miguel Cruz de la Mota, y para el país entero y la comunidad jurídica”, manifestó la familia del imputado en el comunicado que entregó su abogado Many Sierra a la prensa.
“La familia Cruz de la Mota, reitera que lamenta la situación y apela al perdón, que de ante mano ha expresado y aceptado la familia Jorge Villegas”, agregaron.
Por igual, dijeron que es una situación en la que han perdido todos, “unos y otros, sin excepción”.
“Pensemos por un instante en la difícil situación por la que están atravesando ambas familias, que no son culpables de lo ocurrido”, expresaron.
Además, rogaron a Dios que con el tiempo “se curen las heridas de la muerte y de las razones que pudieron haber generado esta incomprensible situación”.
“Lo cierto es, que hay dos familias destrozadas”, manifestaron previo a solicitar que las autoridades investiguen objetivamente y que al final se conozca la verdad sin especulaciones del lamentable hecho.
La tarde de este miércoles, el Ministerio Público solicitó que a Fausto Miguel Cruz, a quien acusan de asesinato y porte y tenencia de arma de fuego ilegal, se le imponga prisión preventiva como medida de coerción.
De acuerdo a lo informado, la audiencia para conocerle medida de coerción a Cruz fue pautada para mañana a las 9 de la mañana.
El documento, donde el órgano acusador también presentó los cargos contra el imputado, fue depositado en la Oficina de Atención Permanente del Distrito Nacional por los fiscales Kelvin Colón, Carolin Junesca y Vladimir Viloria.
Cruz, de 56 años, permanece detenido en la cárcel preventiva del Palacio de Justicia de Ciudad Nueva a donde, bajo un fuerte dispositivo de seguridad, fue trasladado la madrugada del martes, tras ser interrogado durante varias horas por la directora de Persecución del Ministerio Público, Yeni Berenice Reynoso.
