Familiares de un empleado de la Procuraduría General de la República, que prestaba servicios en la cárcel preventiva del palacio de justicia, a 10 meses de su muerte reclaman se haga justicia y los responsables de su homicidio sean castigados.
La víctima, Leonardo Antonio Fernández Reyes alias (Nano), de 52 años fue baleado por los presuntos delincuentes en medio de un atraco para despojarlo de su vehículo y otras pertenencias, murió en un hospital producto de las heridas de bala.
Por el caso hay tres personas imputadas y familiares consideran que deben ser condenados por el crimen ocurrido en noviembre del 2022.