Santiago. Se entregó ayer Iván Paulino, quien había sido declarado en calidad de prófugo y vinculado al caso Falcón, mientras el juez Miguel Báez recesó nuevamente el conocimiento de la medida al hermano y padrastro del principal cabecilla.
Paulino, quien administraba una estación de combustible ubicada en Quinigua, Villa González, también un food shop, en la autopista Ramón Cáceres, Moca, ambas clausuradas por el Ministerio Público, explicó que se puso a disposición de la justicia para que se le investigue.
En tanto el abogado José Reynoso explicó que el ministerio público como dueño de la investigación, determinará si su cliente se somete o le otorga libertad, esto al responder si el imputado quedó en calidad de detenido.
En tanto que el juez Miguel Báez, de Atención Permanente, recesó hasta hoy viernes la coerción a Juan Carlos Mosquea y Alejandro Pérez, hermano y padrastro de Erick Mosquea, sindicado como el cabecilla de la red.
