Aceras

Próxima una nueva alcaldía en el Distrito Nacional, aflora la esperanza de que el persistente problema del secuestro de las aceras sea debidamente enfrentado. Tomadas para mil usos ajenos a su fin original: parqueos de negocios, construcciones, comercio callejero, depósito de desperdicios, los peatones no pueden hacer uso libre y tranquilo de éstas. Recientemente durante un tapón en la calle Dr. Defilló, fue dramático ver una dama con un niño de la mano tirada a la calzada, intentando avanzar a pie entre los vehículos, por efecto de la acera ahí estar convertida en estacionamiento particular. En condición de peatona, yo misma he padecido mucho eso. Si se trata de personas no videntes, es para llorar. Una irregularidad municipal degradante e indignante.