Diciembre es un mes especial. Es el período en que las empresas e instituciones públicas entregan el salario 13 a sus servidores. Es un período en que se incrementa el tráfico ciudadano en calles y carreteras, y en los aeropuertos. Se genera una gran movilidad.Al margen del valor de la parte religiosa del día 25, cuando se conmemora la Natividad de Jesús, o cuando se celebra con tanto entusiasmo la llegada del año nuevo, todo ese proceso de viajes y retornos, reencuentros de amigos y familiares, obliga a la adopción de medidas que fortalezcan o mejoren la seguridad de las personas.
Ayer las autoridades anunciaron dos medidas adicionales de prevención y protección ciudadana para la temporada. La Policía había anunciado que desde esta semana pondría en las calles más agentes.
Ayer Obras Públicas masificó su presencia en las carreteras principales. Lanzó el “Operativo Navideño de Asistencia y Protección Vial 2015”, con la integración de más de 225 nuevas unidades de la Comisión Militar y Policial (COMIPOL), que tienen presencia en las vías troncales que comunican las tres regiones. El operativo se extenderá hasta enero.
Asimismo, representantes de los organismos de seguridad del Estado coordinaron al “más alto nivel” acciones dirigidas a garantizar la seguridad de los usuarios de las terminales aeroportuarias durante las fiestas navideñas.
Imaginamos que se trata de una coordinación central. Que la gente llegue por los aeropuertos o se transporte de un sitio a otro del país sin riesgos.
Aplaudimos estas iniciativas.
Extrañamos al Centro de Operaciones de Emergencias (COE).
