El cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez manifestó ayer que República Dominicana no puede “continuar siendo mojiganga de nadie” e instó a trabajar para mantener la identidad del pueblo dominicano.López Rodríguez reiteró que a raíz de la sentencia 168-13 del Tribunal Constitucional, “se ha armado una confabulación internacional perversa, de naciones que no les luce lo que están haciendo”, en contra de esta nación. Expresó que como nación se debe plantear lo que se hará de manera definitiva con el trasiego de personas sin control, “lo cual hemos tenido por tiempo indefinido”.
“Yo en principio apoyé la sentencia del Tribunal Constitucional, la apoyo porque considero que después de estar en el desorden mayúsculo que hemos vivido, que tengamos definitivamente un instrumento legal que sea el que paute la conducta del país en términos migratorios”, externó el Cardenal.
También refirió que ese instrumento legal ayuda a detectar a los delincuentes que vienen de Europa a buscar refugio en República Dominicana.
López Rodríguez indicó que el presidente Danilo Medina “verá cuándo envía para el Congreso lo que debe ser, según han dicho, la ley de regularización, que otros han querido hablar en términos equívocos, no con la mejor de las intenciones”.
Misa por 75 años de Migración
El purpurado habló al celebrar la misa con motivo al 75 aniversario de la creación de la Dirección General de Migración, en la iglesia Nuestra Señora de la Paz. En ese escenario, el director de la entidad, José Ricardo Taveras, pidió no dejarse arropar por el “discurso del victimismo migratorio que administran grupos de interés” que buscan dañar la imagen de la República Dominicana.
Expresó que al conmemorar el 75 aniversario de Migración, no se siente orgulloso de la manera blanda y rutinaria con que durante muchos años se asumió el control migratorio.
Dijo que desde hace tiempo es necesario un cambio de actitud en torno al tema por lo cual se debe construir un aparato migratorio sólidamente fundado, en el estado de derecho, el respeto de los derechos humanos y en la sana integración de los migrantes que vinieren en orden.
Refirió que “la polvareda mediática sustentada en el victimismo” no nos deja ver con seriedad una adecuada política migratoria, integración ordenada y legal de extranjeros, así como la construcción de responsabilidades comunes, lo cual es vital para las naciones.
