Más allá de la calidad a la que muchos abogan en el séptimo arte dominicano, el crecimiento vertiginoso de estrenos en los últimos años ha sido el principal aspecto que se resalta a partir de la Ley de Cine.
Tal y como citan las autoridades, desde la promulgación de la Ley de Cine, en julio de 2010, la industria nacional ha dado un salto cuantitativo impresionante.
Desde esa fecha y hasta el 2013 se filmaron 37 películas en el país, una tendencia extraordinaria si se compara con los 101 filmes que se realizaron desde el 1922 al 2009 (87 años). (Datos del Ministerio de Cultura). En los últimos tres años hay una realidad que llama poderosamente la atención de las autoridades. “Vimos a varios beneficiarse enormemente por los éxitos de taquilla y otras cosas, mientras otros ponían y dejaban la piel en el afán de dotarnos, no sólo de películas de calidad, sino de un sello dominicano, de una manera de hacer cine que nos identifique. Y aquí nos encontramos ante un problema que trae a los teóricos de cabeza: nuestra identidad insular”, sostiene el ministro de Cultura, José Antonio Rodríguez.
Por la calidad
Ante esta realidad, la Asociación de Industrias de la República Dominicana (AIRD), el Consejo Nacional de Competitividad (CNC) y el Ministerio de Cultura han lanzado el Clúster Cultural “El Cine como Marca País”. “El cine no sólo ha crecido sino que tiene un enorme potencial para servir de enclave de todos los sectores productivos, pues se encadena con la agricultura, los servicios financieros, la infraestructura, el turismo, telecomunicaciones, comercio; otros rubros culturales, como la manufactura y con otros muchos sectores más”, resaltó Ligia Bonetti, presidenta de la AIRD, durante el encuentro que se realizó en la Torre Empresarial de la avenida Sarasota.
También entiende que el cine es un medio idóneo para contribuir con la imagen de la nación, “ya que permite presentar las bondades de la nación, nuestros productos, experimentar nuestra música, nuestro arte, nuestro deporte, entre otros. En fin, es una excelente herramienta de exportación y de marca país”.
De su lado, el ministro de Cultura saludó la iniciativa de la AIRD y del CNC, “donde podremos entrar y sentarnos a conversar, a discutir buenos argumentos y guiones, a ponernos de acuerdo en qué proyectos apoyamos, y en base a qué características”. “Al fin, creemos que lo que más nos beneficia, como país, es que mostremos al mundo una imagen cinematográfica auténticamente dominicana, mucho más rica, en términos técnicos, y que se vea a nuestra tierra como una cantera de escenarios de la más diversa índole”, aseguró. Puntualizó que para contribuir con la calidad, también se está gestionando la creación del Instituto de las Artes Cinematográficas, el cual espera inicie sus operaciones en 2015.
Abogan por una estrategia nacional
El encuentro tuvo lugar en el salón Multiusos de la Torre Empresarial, al que asistieron, el ministro de Industria y Comercio, José del Castillo, y el director del Consejo Nacional de Competitividad, Andrés Van Der Horst. Este último entiende que “las leyes no necesariamente garantizan que el cine nuestro sea competitivo en un mundo como el de hoy”. “También se necesita una estrategia para saber hacía dónde se va, cómo se va, en qué se va y porqué se va… sin una estrategia nacional es difícil que se sostenga una industria como esta”, afirmó.
