El costo de una promesa incumplida: RD$5,000 millones

La semana pasada presentamos la magnitud del despilfarro que el gobierno exhibe en el servicio exterior.  Más de RD$3,000 millones al año…

La semana pasada presentamos la magnitud del despilfarro que el gobierno exhibe en el servicio exterior.  Más de RD$3,000 millones al año están siendo derrochados por el gobierno del PLD en el pago del exceso de personal en embajadas y consulados en el exterior, así como localmente en una Cancillería que se da el lujo de contar con 113 embajadores adscritos a ella.

El despilfarro en el gasto del gobierno no se limita al ámbito del servicio exterior. La proclividad del Poder Ejecutivo a nombrar viceministros no tiene precedentes en la historia del país y del resto del mundo. El gobierno dominicano tiene en nómina 334 viceministros, distribuidos entre los diferentes ministerios: Agricultura 37, Salud Pública 33, Educación 29, Deportes 28, Trabajo 25, Medio Ambiente 21, Industria y Comercio 20, Juventud 19, Interior y Policía 19, Obras Públicas 18, Turismo 18, Educación Superior, Ciencia y Tecnología 13, Mujer 12, Relaciones Exteriores 9, Cultura 8, Hacienda 8, Administración Pública 5, Administrativo 5, Economía 4, y Fuerzas Armadas 3.

Países más grandes que nosotros parecen no tener necesidad de contar con un ejército tan poderoso de viceministros. Canadá, por ejemplo, un país con un territorio 206 veces más grande que el nuestro y una población 3.5 veces la de República Dominicana, apenas tiene 25 viceministros en todo el gobierno.

Nosotros tenemos 309 más de los que tiene el gobierno canadiense. Hillary Clinton, la poderosa secretaria de Estado del gobierno de los Estados Unidos, se maneja con un solo viceministro para dirigir la política de relaciones exteriores del país que mayor incidencia tiene en el planeta en el ámbito económico y de la política internacional. Nuestro canciller, sin embargo, que maneja las relaciones exteriores de un país que apenas tiene el 0.5% del territorio de EE UU y el 3% de la población norteamericana, necesita para realizar sus funciones, el apoyo de 9 viceministros de relaciones exteriores.

El 16 de agosto del 2004, el presidente Leonel Fernández, en su discurso de juramentación señaló que “hay que suprimir aquellos cargos de subsecretarios de Estado no contemplados en la ley orgánica de la Secretaría de Estado correspondiente”. Veamos si el presidente Fernández cumplió su promesa.

La Ley 8-65 establece que la Secretaría (Ministerio) de Agricultura debe tener 3 viceministros. Leonel Fernández ha nombrado 37. La correspondiente a Salud Pública establece que ese Ministerio debe tener 5 viceministros, Leonel ha nombrado 33.  La de Educación establece que ese Ministerio debe operar con 3 viceministros pero el presidente Fernández ha nombrado 29.

La Ley 356-05 establece un total de 6 viceministros para el Ministerio de Deportes, el cual opera hoy con 28 viceministros. Lo mismo ocurre con Medio Ambiente. La ley dice que debe tener 5 viceministros, pero tiene 21; la de Industria y Comercio establece un viceministro, pero Leonel Fernández ha nombrado 20. En total, las leyes orgánicas establecen un total de 59 viceministros, pero el Gobierno del PLD ha nombrado 334. En otras palabras, tenemos 275 viceministros inorgánicos, sin respaldo legal. ¿Olvidó el presidente Fernández su promesa del 2004 de cumplir con las leyes orgánicas de las secretarías de Estado?

El exceso de viceministros nos cuesta anualmente unos RD$715 millones si se tiene en cuenta los salarios que devengan, los gastos de representación,  las tarjetas de crédito, asignación de combustibles, yipetas, mantenimiento y seguros de vehículos, secretaria, chofer, seguridad, celulares, viáticos, y otros gastos indirectos generados por el cargo.

Si el presidente Fernández hubiese cumplido con la promesa que hizo el 16 de agosto del 2004 y, por tanto, hubiese nombrado solamente los viceministros establecidos por las leyes orgánicas de los ministerios correspondientes, le habría ahorrado al país RD$5,000 millones en los últimos siete años, con lo cual, habría podido aumentar la inversión en educación, construyendo 23,800 aulas para los niveles inicial, básica y media en esos siete años, o elevar el número de hogares que se benefician de la tarjeta Solidaridad en casi 80,000 nuevos hogares.

Particularmente pienso que con 59 viceministros, más del doble de los que tiene el gobierno de Canadá, el Gobierno dominicano podría manejarse sin problemas. Ojalá que la promesa incumplida de Leonel Fernández, sea cumplida fielmente por el nuevo gobierno que asumirá en seis meses.

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