No lo creemos

No lo podemos creer. De ninguna manera, el aviso de la Asociación Nacional de Clínicas Privadas (ANDECLIP),  de que desde el próximo lunes no atenderán a los asegurados del Seguro Familiar de Salud (SFS).Estamos persuadidos de que…

No lo podemos creer. De ninguna manera, el aviso de la Asociación Nacional de Clínicas Privadas (ANDECLIP),  de que desde el próximo lunes no atenderán a los asegurados del Seguro Familiar de Salud (SFS).

Estamos persuadidos de que se trata de una presión del presidente de ANDECLIP para lograr su ansiado propósito de que las autoridades del Consejo Nacional de la Seguridad Social (CNSS) accedan a su petición de que sea aumentada la contribución o cápita del sistema por cada afiliado, en el entendido de que no guarda proporción con los costos de los servicios médicos.

Y no puede ser de otra manera, porque, cómo van a dejar las clínicas en el abandono a más de 2.5 millones de personas, que si bien son abonadas de las Administradoras de Riesgos de Salud (ADARS), a su vez son sus clientes directos, que igual sufren las precariedades y limitaciones de las deficientes coberturas.

No extraña a ningún dominicano afiliado al SFS el hecho de que cada vez resulta más insoportable costear un procedimiento que implique un internamiento aunque sea de un día. Saber que una cirugía, por ejemplo, entraña un pago directo, extra, para el cirujano interviniente, que debe pagar “por fuera” al médico anestesista, que tiene que pagar “diferencia” por el uso del quirófano.
Que la cobertura no da y que quienes más lo padecen son precisamente los pacientes. Que las clínicas sólo están buscando una mayor participación del pastel, pues quienes más cargan son los asegurados. Y ni hablar de los escasos montos asignados a las medicinas. Es una barbaridad.

No nos parece que hayan sido agotados todos los procedimientos, para de repente anunciar una paralización de los servicios a los asegurados.

Imagínese el cuadro de las emergencias de las clínicas con decenas de pacientes, a los cuales les negarían las atenciones. ¿Pueden las clínicas soportar una presión de esa naturaleza? ¿Y la responsabilidad social de estos establecimientos, dónde iría a parar? Preferimos creer que estamos ante una presión para alcanzar una negociación y que en forma alguna ANDECLIP  puede cumplir su amenaza. Sería lamentable.

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