David Ortiz impone el respeto en las GL con 37 años de edad

David Ortiz es un claro ejemplo de que la edad es un número. A sus 37 años, tiene un bate tan productivo como el de cualquier joven estrella en las Grandes Ligas.

David Ortiz es un claro ejemplo de que la edad es un número. A sus 37 años, tiene un bate tan productivo como el de cualquier joven estrella en las Grandes Ligas.La noche de este miércoles se convirtió en  el dominicano número 16 con 2,000 o más imparables en la historia de las Grandes Ligas. Este es su último logro en una temporada que le ha visto acercarse a la meta anhelada de ser un candidato con grandes posibilidades de ingresar al Salón de la Fama de Cooperstown.

El hecho de ser bateador designado es un escollo que aún debe superar, pero si hay uno que tiene con qué derrumbar ese muro es precisamente Ortiz.

En ese grupo de criollos con 2 mil o más inatrapables, el zurdo de Boston es apenas el séptimo que registra 400 o más cuadrangulares. Llegó a la jornada de anoche con 2,001 intrapables y 427 tetrabases. Le acompañan Álex Rodríguez (2,921 hits y 651 Hr.), Sammy Sosa (2,408-609), Manny Ramírez (2,574-555),  Albert Pujols (2,347-492), Vladimir Guerrero (2,590-449) y Alfonso Soriano (2,026-401). 

Al mando en Boston

Nada fácil para un pelotero a la edad de Ortiz registrar una campaña con sus números. Arrancó la jornada de anoche de las Mayores con un promedio de .313, 26 cuadrangulares y 89 remolcadas. 

Esto quiere decir que El Big Papi, como le llaman, se encamina a una contienda de .300 de average, 30 o más cuadrangulares y 100 o más producidas. La última vez que David compiló estos números (.300, 30 Hr. y 100 empujadas) fue en 2007, cuando bateó para .332, disparó 35 tetrabases y remolcó 117. La última vez que sacudió tres decenas de vuelacercas y produjo un centenar de vueltas fue en la campaña de 2010.

El dominicano es el líder de los Medias Rojas en los principales departamentos ofensivos.  Todo esto a pesar de que no inició jugando mientras se recuperaba de una lesión en el talón de Aquiles.

Ortiz ha reiterado que su intención es terminar su carrera por lo alto. No hay dudas que alcanzar al menos los 450 cuadrangulares está en un plano real para él. Además de las cifras que pueda registrar habrá que sumarle sus dos anillos de Serie Mundial y un carisma y respeto que le tiene en la cima de la popularidad en Boston.

David es un ídolo en la referida ciudad. La grey bostoniana se ha rendido a sus pies en varias oportunidades. En una campaña donde Miguel Cabrera, Chris Davis y Mike Trout, entre otros talentosos jóvenes, se dejan sentir, un veterano de 37 años hace de las suyas.

Leyland lo felicita por su más reciente hazaña

A pesar de ser el dirigente contrario de Ortiz la noche que dio el hits 2,000, Jim Leyland no tuvo más que elogios para el dominicano. “Felicidades. Esa es una tremenda hazaña. Es un hombre decente, muy querido aquí y dueño de una gran carrera. Me alegro por él”, expresó el veterano dirigente.

“Otra hazaña de Papi”, dijo Shane Victorino. El capataz de Boston, John Farrell, tuvo grandes palabras para Ortiz, de quien “puede hacer aún más”.

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