Más de 60 viviendas del barrio La Barquita, en Santo Domingo Este, fueron desalojadas ante las fuertes lluvias registradas en los últimos días, producto de la vaguada que afecta al país.
Es el caso de Antonio Familia, quien desde la semana pasada está refugiado en casa de unos vecinos ante la crecida del río Ozama, cuyas aguas penetraron en el pequeño rancho donde vive.
Familia se encontraba ayer intentando limpiar parte del lodo y el sedimento dejado por el agua. “Mire cómo tengo todos los trastes encaramados, esto se está inundando a cada rato desde que le hicieron un relleno a aquel lado del río”.
De su lado, el dirigente comunitario Rafael Holguín afirmó que de las 225 familias que comparten terreno con el afluente, un 60 por ciento ha tenido que salir de sus casas en estos días, lo que ha convertido a una parte de La Barquita en un “barrio fantasma”.
“Ya en los últimos años cualquier chubasco que cae hace daño, la gente ha tenido que mudarse, hay muchas casitas solas. Esto se ha convertido en un barrio fantasma, ya la gente no quiere meterse aquí”, agregó.
Mientras tanto, los rayos de sol de la mañana, fueron aprovechados por muchas mujeres para lavar y limpiar sus viviendas, tratando de retornar a la normalidad.
En La Ciénaga, el rostro de la pobreza y el hacinamiento era el mismo, sin embargo, nadie había querido abandonar su casa y dejar sus pocas pertenencias.
“Anoche sacamos pila de agua y tuvimos que subirnos todos en una cama para no mojarnos”, dijo Tania Peña, quien es madre de siete hijos.
Contaminación causa enfermedades
Mostrando una pierna hinchada, Peña dijo que había contraído una infección producto de las picaduras de insectos que se crían en las aguas contaminadas a pocos metros de la casucha donde vive.
“Imagínese, qué le va uno a decir a los políticos, qué nos saquen de esta vaina, y que le den trabajo a uno, que nos vamos a morir aquí si sigue lloviendo”, se quejó.
Otros como Ramón Rosario, quien dice haber construido la tercera casita debajo del puente Duarte cuando todavía las personas no desafiaban la cercanía con el río, minimizó los efectos de las lluvias a las que dijo ya está acostumbrado.
A juicio del anciano, lo que más afecta a los moradores del barrio son los registros tapados en la calle Primera, lo cual ocasiona serios inconvenientes sanitarios que derivan en enfermedades.
Por las fuertes lluvias de los últimos días y la consecuente crecida del río Ozama, también han resultado afectados los barrios Los Guandules, La Zurza y La Javilla, todos ubicados a la ribera del contaminado afluente. Entre tanto, el Centro de Operaciones de Emergencias (COE) informó que en las últimas 24 horas han sido desplazadas 3 mil personas más a casas de familiares y amigos, debido a las inundaciones provocadas por las lluvias de los últimos días.
El reporte del COE indica que en Santiago, 600 viviendas resultaron anegadas y 14 están afectadas severamente, por lo que ya son 614 casas más las evacuadas.
Asimismo, un hombre murió en la comunidad La Luisa, del distrito municipal Manuel Bueno, en Dajabón, al ser arrastrado por las aguas del río Inaje, cuando venía de regreso a su casa luego de concluir trabajos agrícolas.
La víctima fue identificada como Guillermo Tejada y vecinos y familiares lo encontraron la mañana de ayer. Según versiones, Tejada se transportaba en un caballo y al parecer ambos fueron arrastrados por el río.
Provincias en alerta
Meteorología informó que se mantiene la alerta contra inundaciones repentinas y deslizamientos de tierra para los residentes cercanos a ríos, arroyos y cañadas de las provincias Valverde, Santiago Rodríguez, Santiago, La Vega, Monseñor Nouel, Sánchez Ramírez, Duarte (en especial el bajo Yuna). También para Monte Plata, San Pedro de Macorís, La Romana, El Seibo, Hato Mayor y San Juan de la Maguana.
