El actual director de Aduanas, Enrique Ramírez Paniagua, introdujo un tema que su antecesor Fernando Fernández había echado de lado y sepultado: la modificación de la ley que rige a esa institución. El tema de esa posible reforma generó tanto debate que alcanzó confrontaciones agrias entre los senadores Reinaldo Pared Pérez, Charlie Mariotti (ambos del Partido de la Liberación Dominicana) y Fernández, de las filas de la misma organización política. Fernando Fernández decía: “Lo que está dando resultados no se cambia… y con esa ley podemos caminar sin problemas”.
“Todos sabemos que la base legal que actualmente regula los procesos aduaneros está regida por la ley 3489, que data del año 1953, con casi 64 años de antigüedad, y hasta la fecha continúa vigente, aunque en otras oportunidades se han sometido al Congreso Nacional diferentes proyectos, con el objeto de modernizar nuestra base legal”, dijo ayer Ramírez Paniagua, orador invitado del Almuerzo Mensual de la Cámara Americana de Comercio (AMCHAMRD).
Aseguró que contar con una nueva Ley de Aduanas es una oportunidad que se presenta para fortalecer más a la DGA de cara a los nuevos tiempos. “Todo cambia y las instituciones también, por cuanto adecuarnos permitiría dar más seguridad jurídica a los actores del comercio”, planteó, en la actividad realizada en el hotel El Embajador de la capital dominicana. Explicó que la Ley de Autonomía de la DGA recoge muchas conquistas que fortalecen institucionalmente la administración de aduana. “Son conquistas imprescindibles, si queremos lograr una aduana que desempeñe eficientemente su rol de facilitación y control del comercio internacional”, expresó el funcionario público.
Ramírez Paniagua, que es economista con maestría en Negocios Internacionales, informó a los asistentes que se ha conformado una mesa de trabajo dirigida por la Comisión de Industria, Comercio y Zonas Francas del Senado, integrada por la Dirección General de Aduanas, el Ministerio de Industria y Comercio, el Centro de Exportación e Inversión y el Consejo Nacional de Competitividad, así como por los gremios empresariales que agrupan a los importadores, exportadores, agentes de aduanas, y demás operadores del comercio exterior”, para estudiar la pieza.
“En este caso hemos involucrado a todos los actores del sistema. Los tiempos cambian y las instituciones también. Una ley con 64 años evidentemente que amerita ser ajustada. No es que se cambiará radicalmente pero hay que ajustarla a los nuevos tiempos”, apuntó.
Y sostuvo que el Senado y los gremios empresariales han comprendido la necesidad de revisar el régimen sancionador, para garantizar su proporcionalidad y que sirva a la vez como elemento disuasivo para prevenir los ilícitos aduaneros que tanto afectan los ingresos tributarios, la sana competencia y las condiciones de equidad.
Ramírez Paniagua dijo que antes de asumir el puesto de director de Aduanas, la gente veía a esa institución como recaudadora de impuesto, pura y simplemente. “Eso ha ido cambiando”, indicó.
“Quiero asegurarles algo a lo que aspiramos… Ser un ente facilitador del comercio internacional, contribuyendo al crecimiento económico de la nación y la competitividad, con una adecuada fiscalización y vigilancia del tráfico internacional de mercancías”, expresó Ramírez Paniagua en el inició de su exposición.
El salón The Garden Tent, del hotel El Embajador, donde abordó ese y otros temas, estuvo lleno de personas. Entre ellos hubo empresarios de diversas actividades productivas.
El despacho aduanal de las 48 horas dominicanas
Ramírez Paniagua aprovechó el escenario para reconocer los esfuerzos de la AMCHAMDR, por ser persistentes y seguir creando conciencia, en cuanto a que el rol de las instituciones debe enfocarse en una facilitación comercial que promueva la competitividad del país y lo coloque en mejores condiciones de equidad frente a las demandas del entorno actual. “Identificarnos con eso, asumirlo y convertirlo en hechos concretos será una de las prioridades de esta administración”, prometió. Dijo que en el país la mayor parte del despacho aduanero se ejecuta en un promedio máximo de 48 horas.
Los retos que trae cada día el comercio mundial
El funcionario no soltó el interés en los temas abordados ni un instante. “El comercio mundial está en constante dinamismo, como una consecuencia de los cambios en los patrones de consumo de la humanidad y los avances tecnológicos, que modelan rápidamente el quehacer de las instituciones aduaneras. República Dominicana no está ajena a esas trasformaciones”, planteó. Desde su punto de vista, las nuevas realidades de las regulaciones y esquemas de facilitación de comercio internacional representan retos para este país.
