La revelación la hizo ayer el presidente de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), al ofrecer detalles del decomiso.El mayor general Rolando Rosado Mateo no dijo, sin embargo, cuál sería el blanco de ataque de esas supuestas acciones terroristas ni el país hacia donde estaba dirigido el cargamento de mil 77 kilos de cocaína. Sólo se limitó a decir que se trató de un operativo que conllevó un año de investigación, y que participaron todos los organismos de seguridad del Estado, instituciones nacionales y agencias investigativas internacionales.
Rosado Mateo dijo que como resultado de esta labor conjunta se desarrollaron jornadas de apresamiento dentro y fuera del país de manera simultánea. “Le estoy diciendo que el trasiego de esta droga tenía como propósito generar beneficios, generar ganancias para usarlos en actividades terroristas”, expuso el titular de la DNCD.
Cuando se le preguntó cuál sería el país o países donde se desarrollarían este tipo de actividades, respondió diciendo: “si le digo dónde, entonces obviamente voy a tener que mencionar países que en este momento no es conveniente a este nivel de las investigaciones”, puntualizó Rosado Mateo.
Dijo que por las características propias de esta investigación se ven “en la imperiosa necesidad” de no dar detalles que podrían resultar reveladores y que, por tal motivo, incidirían negativamente en la marcha de las pesquisas vinculadas al alijo decomisado en La Romana. “Hay informaciones de esas tienen que mantenerse cerradas”, subrayó.
Rosado Mateo dijo que en la investigación de este hecho están envueltos “todos los poderes nacionales”.
El presidente de la DNCD indicó que al hablar de todos los “poderes nacionales” se refiere a algunos sectores de la vida productiva nacional que han estado directamente involucrados en este proceso de investigación.
