Los Alcarrizos.- Ante el incremento de asaltos, atracos y robos que arropa al municipio Los Alcarrizos y por temor de ser víctimas fácil de los delincuentes, propietarios de comercios ponen en práctica su propio sistema de seguridad, colocando verjas de acero en sus negocios para evitar que los antisociales penetren al interior a ellos.
Ya no es extraño observar los barrotes de seguridad en bancas de loterías, casas-compra ventas, tiendas de electrodomésticos, farmacias, salones de bellezas, cafeterías y otros.
En los colmados, farmacias y otros donde se expenden mercancías, los clientes se ven precisados a realizar sus compras desde fuera de los establecimientos.
Pese a que los dueños de comercios dicen sentirse prisioneros y como si estuvieran en una celda por estar rodeados de hierro, reconocen que esa es la única manera de resguardar sus bienes y no ser objetos de un sorpresivo asalto por parte de los delincuentes.
Aseguran sentirse desprotegidos por las autoridades policiales, que raras veces se ven patrullando las calles de esta demarcación, mientras los delincuentes cometen sus tropelías.
Mediante un amplio recorrido realizado por barrios como 24 de Abril, Canta la Rana, Los Libertadores, Landia, Invi, Obra Públicas, Savica, Pueblo Nuevo, Nuevo Amanecer, Nuevo Horizonte, La Piña, y otros, se pudo observar que numerosos negocios de esos lugares están protegidos por estructuras de hierro, tanto dentro como fuera de los mismos.
Pero el clima de inseguridad no solo afecta a los dueños de comercios, ya que los delincuentes, provistos de pistolas y revólveres, imponen el terror en las calles de esta localidad, atracando a transeúntes, según revelan las denuncias de ciudadanos afectados.
