El crudo y las bolsas se desploman

Nueva York. El petróleo de Texas descendió ayer el 6.29 % y cerró en 80.51 dólares por barril, su caída más pronunciada desde el pasado 8 de agosto.

Nueva York. El petróleo de Texas descendió ayer el 6.29 % y cerró en 80.51 dólares por barril, su caída más pronunciada desde el pasado 8 de agosto.

Al final de la cuarta sesión de la semana en la Bolsa de Nueva York, los contratos de futuros del Petróleo Intermedio de Texas para entrega en noviembre, los de más próximo vencimiento, habían restado 5,41 dólares al precio de cierre anterior.

En tanto, Wall Street se hundió en terreno negativo en medio de los temores generalizados a una nueva recesión y el Dow Jones de Industriales, su principal indicador, cerró con una caída del 3.51 %, con lo que perdió la barrera psicológica de los 11.000 puntos.

Según datos provisionales al cierre de la sesión, ese indicador, que agrupa a treinta de las mayores empresas cotizadas en EE.UU., restó 391.01 puntos para terminar en 10,743.81 unidades, al tiempo que el selectivo S&P 500 perdió el 3,19 % y el índice compuesto del mercado Nasdaq cedió el 3,25 %.

Mientras que la cotización del crudo se vio presionada a la baja en medio del desplome generalizado de las bolsas mundiales por la decepción con que recibieron los inversores la última medida anunciada el miércoles por la Reserva Federal de Estados Unidos para intentar estimular la aletargada economía del país.

Bajó 80 dólares

Durante la jornada, el petróleo de referencia en EE.UU. llegó incluso a descender por debajo de la barrera psicológica de los 80 dólares por barril, al situarse en 79.91 dólares por barril poco antes del cierre, aunque finalmente terminó en 80.51 dólares, su mayor retroceso en seis semanas. El temor a una desaceleración económica en EE.UU , el mayor consumidor de crudo del mundo junto a China, se profundizó tras el panorama sombrío que pintó la Fed el miércoles, que admitió que la tasa de desempleo sigue siendo alta, el gasto de los hogares ha crecido a un ritmo modesto y el sector de la vivienda permanece deprimido.

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