Francisco Disla, director de «El Hoyo del Diablo»

Anteriormente llamada “La Casa de San Juan”, esta película iba a ser estrenada el pasado año, sin embargo no fue hasta este…

Anteriormente llamada “La Casa de San Juan”, esta película iba a ser estrenada el pasado año, sin embargo no fue hasta este 2012 decidieron exhibirlas en las pantallas. El cambio de nombre se debió a que otra producción dominicana se estrenó con uno parecido: “La Casa del KM5”. Pero la historia y la estructura narrativa es diferente, y no querían que el público se confundiera. También hubo cambios en la línea grafica y una que dos tomas adicionales. Según su director son los efectos, la calidad de imágenes, la música, el diseño de sonido y la dirección de arte.

En el rodaje de la historia estuvo involucrado un equipo de más de 200 actores y técnicos. A pesar de que la película no se filmó bajo los reglamentos de la Ley de Cine Dominicana, tuvo un presupuesto de unos 24 millones de pesos. Narra la historia de Sofía, una joven estudiante de de medicina, quien al morir su padre empieza a percibir sensaciones que la inquietan y la conducen a querer saber que sucede. Es así como emprenderá, junto a un grupo de amigos, un viaje que la llevará al encuentro con la misteriosa casa.

La canción “Vivo” de la banda Toque Profundo, será el tema base de la película. Y por lo visto en el tráiler, la película tendrá muchos, y nuevos efectos especiales. Como explicó su director, en la industria se ha intentado utilizarlos, pero entiende que su equipo lo logró porque no tuvieron miedo al fallo, porque miraron el horizonte e intentaron cruzar esa línea imaginaria que divide al cine latino de la industria hollywoodense. Pero aclara que fue muy difícil porque las marcas ni las publicitarias querían apoyarlos. Aquí el resto de la entrevista:

¿De dónde se alimentó para la realización de esta historia? ¿Tuvo alguna inspiración especial? Me inspiró el cine provincial que hace todo con la mano. Soy fanático de películas como “El desvío”, “Masacre en el Río Yuna”, “Cenizas del Mal”, y de todo ese cine de los 80 de la mano de Wes Craven y Sam Raimi. “The Haunting in Connecticut” y “The Amityville Horror”, parte de su historia y su trama, inspiraron la película.

¿A dónde piensa llegar con la historia? Pienso tratar de llegar o de imitar el estilo de Juan Bosch, ese realismo mágico que lo caracterizaba y que plasmó en el mundo de la literatura.

Como todo cineasta, ¿ya tiene algún otro proyecto en carpeta? Tengo muchos proyectos, pero todo dependerá de cómo salgamos de este río, si mojados o secos.

Luego de verla realizada, ¿quedo insatisfecho con algún aspecto? Entiendo que los guiones son las bases de todo, y nosotros no somos guionistas. Además hay que entender que somos un cine del tercer mundo. Este es un negocio caro, todo el mundo cobra caro, por lo que con poco dinero hay que inventarse nuevas reglas, nuevas fórmulas y buscar gente nueva con muchas ganas. No hay de otra.

¿Qué trae de diferente esta producción con respecto a otras dominicanas? ¿Quieren más? Efectos especiales, un género y un tema nunca antes hechos, populares y sobre todo comerciales. Una banda sonora increíblemente diferente, un sistema dolby soundround 5.1 y técnicas de 3D modeling.

¿No encuentra que el nombre es un poco morboso? ¿Cree que llamara la atención o llevara menos gente a verla? Creo que esto asegurara más ese tipo de público amantes de las películas de terror y atraerá más a personas curiosas de estos temas. Es más llamativo el nombre y mueve más el morbo.

¿No tiene miedo a las críticas que pueda hacer la Iglesia Católica con respecto a los distintos temas que involucra el filme? Es una película cristiana, que trata la lucha entre el bien y el mal, y la batalla del arcángel Miguel, desde otro punto de vista. Quizás más quimérico, pero al final es lo que somos: un pueblo con una religión sincrética. No hay por qué negarlo, o expresar al mundo lo que somos.

Tienen un elenco de grandes estrellas nacionales e internacionales, ¿Cómo fue el proceso de elección? No fue fácil porque desde que estábamos escribiendo el guion pensábamos en quien podía hacerlo. Muchos dijeron que si, otros que no. Pero casi todos estaban de acuerdo en hacer este intento de cine eclíptico.

 ¿No tiene miedo de querer abarcar mucho con tantos temas como el vudú, historia, socio-política, sincretismo, actividades paranormales, y luego conectar poco al público con el seguimiento de la historia? Si, es algo bien difícil tratar de conectar varias cosas pero lo bueno es que hay patrones y estructuras establecidas que permiten hacer este juego. Que salga bien o mal, bueno es un intento de eso se trata la vida.

El público dominicano está acostumbrado a la comedia. ¿No le preocupa que con “El Hoyo del Diablo” pueda darse el caso de “Andrea”, que se tornó un filme de comedia más que de terror? No. Hicimos una película de terror y suspenso, nunca de comedia. Aunque mundialmente ha funcionado la mezcla de géneros, este no es el caso. Hemos intentado hacer una película de terror que cautive por los elementos del género en sí.

 

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